El expresidente José Mujica se refirió este viernes al fallecimiento de José Pepe Guerra. El exmandatario recordó algunos momentos que compartieron desde su juventud y una de sus últimas charlas en la chacra de Rincón del Cerro hasta la madrugada entre cantos y algunas copas.
“Para mí esta ida de Pepe y de su guitarra simboliza la melancolía de enterrar nuestra juventud, en un sentido amplio”, señaló Mujica en diálogo con Subrayado. “Era un tiempo distinto, ni mejor ni peor, distinto, peculiar, porque había la reminiscencia del canto paisano gaucho, todavía, con Osiris [Rodríguez] Castillos, con Serafín J García, con Rubén Lena, pero era un canto gaucho que uruguayizaba un poco”, relató.
Y continuó: “Es el tiempo del Sabalero, de Zitarrosa, y obviamente, de Los Olimareños, de Santiago Chalar. Está toda esa mezcla, que yo siento que es un tiempo que se va, que viene otro tiempo”, expresó, y agregó que Guerra “simboliza eso” y también “que los muchachos soñábamos mucho con un mundo menos egoísta, que estaba a la vuelta de la esquina”.
Mujica destacó que su tocayo era “un cantor de tango brutal”. “Cuando escabiaba un poco y entonaba el tango, me emocionaba”, manifestó, y sostuvo que “hasta el día de hoy, cuando siento ‘A don José’, de Rubén Lena, cantado por él, se me pone la carne de gallina”. No lo mencionó, pero esa fue la canción que entonaron Los Olimareños en su asunción como presidente en marzo de 2010.
“Ese himno tiene una belleza poética que conmueve, y en la voz de Pepe Guerra adquiere además, por ese tono grave y profundo de su voz... a mí me causa una emoción, por suerte se va a quedar cantando”, comentó Mujica.
El dirigente frenteamplista recordó el último asado que compartieron juntos y contó que en esa oportunidad Guerra cantó algunos tangos hasta la una de la madrugada y fue “inolvidable”.
Asimismo, dijo que cuando se reunían hablaban de todo: música, política, su juventud, “de las cosas que soñábamos”, “del exilio”, “de lo que sufrieron cuando estaban en exterior”.
“Sé que estaba jodido y que ha sufrido mucho, que no lo vamos a olvidar y que quedamos pocos de aquel tiempo. Y que, por suerte, la cultura uruguaya está renaciendo con una cara distinta, con una cosa que se llama murga”, concluyó.