El viernes, el artista puertorriqueño Residente lanzó el tema “Bajo los escombros”, dedicado a las víctimas de los ataques israelíes en Gaza, interpretado por él junto a la cantante palestina Amar Murkus. A las pocas horas, el argentino Andrés Calamaro cuestionó la postura de su colega y salió en defensa de las acciones del Estado de Israel.

Ambos artistas tocarán en Montevideo en octubre, en el mismo escenario, el Antel Arena. Residente dará un recital el jueves 3 y las entradas salen entre 2.300 y 3.500 pesos, mientras que Calamaro lo hará el domingo 30, con entradas que van desde 1.940 a 4.460 pesos.

“Esta canción la escribí desde el dolor. Entre los bombardeos en Gaza. Veo a mi hijo en cada uno de los niños masacrados”, escribió el viernes el puertorriqueño René Pérez en su cuenta de Instagram, desde donde compartió el video del tema.

“Por medio de la música intento manejar la impotencia que siento de no poder hacer nada más que esto. La verdad es que no entiendo el silencio de muchos colegas artistas, me hace perder la esperanza en la humanidad. Como escribió León Gieco alguna vez, ‘sólo le pido a Dios que la guerra no me sea indiferente'. Gracias a Amal Murkus por lograr salir de Palestina en medio de todo esto para manifestarte con tu voz. Gracias también al grupo de niños emigrantes palestinos por llegar hasta el estudio para manifestar su tristeza con valentía. Puerto Rico - Palestina”, dice la presentación del tema, en el que se combinan el clásico fraseo rapero de Residente con el canto en árabe de Murkus, acompañados de instrumentación y armonías de medio oriente.

A las pocas horas, apareció entre los comentarios del posteo de Residente uno firmado por Andrés Calamaro, que decía “Cuando miles de personas piensan (dicen o escriben) exactamente lo mismo (estadísticas y frases idénticas) ya sabemos cómo es. Nadie piensa, nadie escribe. Repiten como ganado ovino la monserga antisemita de Internet. Me dan cifras, las mismas frases, intentan ofender como niños en el patio de la escuela”, expresó el cantante argentino, y continuó en el mismo sentido. “Léanse, todos repiten lo mismo y se vuelven locos si (de buen modo) cambio el eje o el punto de vista. Odian a los judíos y ahora creen que es sexy o moralmente precioso. Ocurre que no. No hay otra”.

Luego Calamaro volvió a las redes y se dirigió directamente a su colega: “Adoro a René y lo admiro mucho, pero me permito disentir. Reclamar por la paz y omitir los crímenes medievales de hace apenas meses no me parece en nada adecuado. Mis hermanos están en Israel, donde muchos argentinos viven y trabajan con dignidad. Criminales en una fiesta electrónica secuestrando y violando reiteradas veces a muchachas occidentales es imperdonable crimen brutal y cobarde. No existe el pueblo palestino, esto es lo peor del ‘mundo’ árabe. Ni Palestina ni el conjunto arábigo están representados por Hamas que juraron asesinar y violentar a gente pacífica como René, ustedes y yo. Somos Occidente, ni machistas ni medievales. Viva el Estado de Israel”.

Calamaro y Residente colaboraron por lo menos en una ocasión, cuando el puertorriqueño, por entonces todavía integrante de Calle 13, fue parte de “Insoportablemente cruel”, la canción de Calamaro incluida en el disco On the rock.

No es la primera vez que Residente expresa su apoyo a la causa palestina. En diciembre había publicado un llamado a sus colegas que decía, entre otras cosas, “No tengan miedo a ser cancelados porque apoyando a Palestina están del lado correcto de la historia” e invitaba a sus seguidores a informarse a través del trabajo de periodistas gazatíes.

Calamaro, por su parte, se ha acercado en los últimos años a posiciones de conservadurismo radical. En 2019, manifestó su apoyo al partido de ultraderecha Vox en el contexto de las elecciones generales de España (“Prefiero el vértigo de los patriotas y reaccionarios, a su manera me representan más que los moderados”, escribió entonces) y en noviembre de 2023 lanzó una serie de posteos en los que justificaba su apoyo a la candidatura de Javier Milei en Argentina.

La letra de “Bajo los escombros”

Así canta Residente:

Desde el arranque, no creo que el linaje se tranque
Son los hijos de los hijos, de los hijos de los hijos
Con palo y con piedra contra los tanques
De aquí nadie nos mueve
Ni el capitán, ni el general, ni el sargento
De nacimiento no tengo visa, pero tengo mi acento
Y aquí me quedo hasta el último suspiro del viento
Sigue firme la gente
Contra todo el ejército de frente
Fuimos criados diferentes
Jugando al fútbol descalzo sobre el cemento caliente
Cruzamos sin puente
Con agua y con viento generamos corriente
Y si no hay pan suficiente
Sobrevivimos con lo que queda en el diente
Las heridas son los nuevos tatuajes
Aguantamos pa’ que llegue el mensaje
Hijos del coraje
Hasta que al mar Muerto se le suba el oleaje
Damos la vida por estos paisajes, por los atardeceres salvajes
Por el juego de luz espontáneo que se refleja en el Mediterráneo
Y lo defendemos a pecho y espada
Con el pañuelo en la cara
El invasor es un puerco, la clara
Porque aunque yo levante las manos, dispara
Pero resistimos con poca agua
Como los árboles de olivo vivimos
Y en nuestros hombros cargamos con todos los escombros
Bajo los escombros están los festejos
Del que dispara de lejos
Del que apretó el botón rojo
Y no se atrevió a mirarme a los ojos
Bajo los escombros se reescribieron
Las historias que no se han contado
Están los libros que nunca leyeron
Los soldados que nos bombardearon.

Por su parte, la traducción de lo que canta Murkus sería:

A lo largo de los mares y bajo el fuego
En medio del asedio y la destrucción
Yo era la casa y me convertí en piedra
Oh, Gaza
Pueblo mío, no desesperes, tu voz es fuerte
Ay patria, no llores, tus lágrimas son preciosas.

Oh, Gaza, oh Azza, oh hija de las olas
Oh, Gaza
A lo largo de los mares y bajo el fuego
En medio del asedio y la destrucción
Yo era la casa y me convertí en piedra
Oh, Gaza
Pueblo mío, no desesperes, tu voz es fuerte
Ay patria, no llores, tus lágrimas son preciosas.

Oh Gaza, oh Azza, oh hija de las olas
Oh, Gaza
Junto a los mares, bajo fuego
Dentro del asedio, entre la destrucción
Oh, Gaza.