Mientras continúa con su cuarta temporada en el teatro Metropolitan de Buenos Aires, Habitación Macbeth, el tour de force del actor y dramaturgo Pompeyo Audivert, está de gira los fines de semana. En esa modalidad intensiva, la obra llegó a Montevideo en 2023 (“fue una función hermosa”) y ahora vuelve, este sábado y domingo, al teatro La Gaviota.
“Es un trabajo desmesurado, de una intensidad extrema. Es lo más importante que hice en mi vida”, asegura Audivert. “En cada función busco avanzar más en la profundización de sus asuntos poéticos, técnicos y metafísicos. Creo que el tiempo va haciendo su trabajo en el sentido de un afinamiento artístico de la experiencia sagrada que significa esta obra para mí. Una zona de autoconocimiento de mi identidad poética, ese que soy más allá del yo histórico, esa zona estructural de la presencia que el teatro nos permite alcanzar a su través. Siempre creí que el teatro es, más allá de las dramaturgias con las que recubre su estructura, una máquina sagrada que sondea identidad y pertenencia a una escala extracotidiana”.
Se trata de investigaciones que Audivert lleva adelante desde hace tres décadas en el estudio-teatro El Cuervo, que él dirige: “A esa máquina teatral, que hacemos existir a salvo de texto, la venimos estudiando como un asunto temático en sí. Se trata de escenas improvisadas desde una técnica formal compositiva muy precisa que rige los acontecimientos escénicos. Habitación Macbeth es un fruto de esa investigación, el cruce de esa técnica y un texto monumental como el de Shakespeare”.
La obra lleva acumulados más de 100.000 espectadores en sus distintas puestas en la región. “En general no noto diferencias en la recepción de los distintos públicos que ven Habitación Macbeth”, observa Audivert. “Se produce un clima sagrado, un silencio hondo que cala en la identidad de fondo y habilita un tipo de imaginación poética que desata la experiencia metafísica del teatro. La obra habla de eso, de quiénes somos detrás de la máscara histórica, de cómo somos interceptados por fuerzas dorsales que tuercen nuestro destino. La metáfora del converso y de la reencarnación restallan en sus vicisitudes. Shakespeare es un autor que arroja un piedrazo en el espejo de las circunstancias que erige y nos revela nuestra pertenencia a ese nivel sobrenatural del que venimos y del que somos un fruto extraviado”.
William Shakespeare continuará alimentando la máquina de Audivert: está por comenzar los ensayos de Hamlet (el piedrazo en el espejo), el proyecto en el que viene trabajando desde el año pasado. “Tiene que ver con lo que estuvimos hablando sobre el teatro como fuerza de choque antimítica, con el teatro como zona liberada donde se restablece un campo artificial de realidad y presencia que es paradójicamente la Realidad, la representación formal de ese nivel que el poder lapida con sus maniobras de abducción y alienación”, adelanta.
Habitación Macbeth, de Pompeyo Audivert. Sábado a las 21.00 y domingo a las 19.00 en el teatro La Gaviota (Mercedes 1805). Entradas a $ 880 y $ 1.090 por Redtickets.