Este jueves, la Casa de los Escritores del Uruguay emitió un comunicado en el que critica la decisión de suspender el ingreso de público a la Biblioteca Nacional, anunciada el lunes por el ministro de Educación y Cultura, José Carlos Mahía, y la directora de la Biblioteca, Rocío Schiappapietra.

Los escritores consideran que “como patrimonio común de la cultura nacional, es necesario velar por su continuidad y garantizar los derechos de acceso y usufructo para toda la ciudadanía” y reconocen la existencia de diversos problemas. “Sin embargo, no nos parece pertinente el cierre del edificio de la biblioteca, máxime sin información respecto del tiempo en el que la institución permanecerá cerrada al público. Dada la centralidad cultural e institucional de la biblioteca, se debería poder iniciar procesos de diagnóstico y planificación sin que se afecten los servicios. Su cierre no resuelve los problemas. Hacerlo sin presentar un plan de trabajo agrega incertidumbre y gravedad a la situación que se pretende resolver”, dice el documento.

Además, el documento señala cuatro aspectos en los que fundamenta su desacuerdo. “Consideramos que una decisión de tal magnitud debió haberse comunicado y respaldado –en el marco de una política cultural pública– con una planificación de contingencia en la que se identificaran objetivos, cronograma de trabajo, etapas de ejecución e inversión proyectada”, dice el primero de ellos.

El segundo punto hace referencia a la falta de discusión previa: “Entendemos que la decisión de cerrar la Biblioteca Nacional debió ser informada en el marco de un diálogo con las asociaciones y entidades ligadas al libro, la investigación, la lectura y la escritura”.

El tercero se refiere a la estrategia comunicacional de las autoridades: “Pensamos que el momento elegido para comunicar la decisión aumentó el impacto de la medida, tanto en su dimensión práctica como simbólica, lo que contradice la voluntad de integrar esfuerzos para promover el desarrollo de una institución clave como la Biblioteca Nacional”.

El cuarto punto apunta a la afectación del servicio: “Concluimos que una decisión política de esta índole no puede afectar el funcionamiento de una institución identitaria y patrimonio de la nación”.

A su vez, los escritores recuerdan que le presentaron al gobierno que asumió en marzo “una propuesta de doce puntos para un Plan Nacional del Libro y la Lectura en el que se incluyen iniciativas para el fomento y fortalecimiento del sistema nacional de bibliotecas”. “En el documento señalamos la necesidad de acciones y políticas públicas para el sector en todo el territorio nacional. Entre otros planteos, se propone impulsar un proceso consultivo orientado a la reforma de la Ley 15.913 –conocida como Ley del Libro–, y garantizar el compromiso del gobierno nacional para el cumplimiento efectivo de la norma”.

La Casa de los Escritores fue fundada en 2003 y hoy es dirigida por una comisión que integran Jorge Nández, Margarita Heinzen y Luis Pereira.