Dos golazos les bastaron a los de la cuchilla para superar a los violetas, aunque sufrieron en el final tras el descuento de Matías Santos. En el primer tiempo castigó Cristian Souza con un bombazo, y en el complemento, tras una linda apilada del autor del primero, cayó el segundo con un remate potente de Federico Martínez. Los de Belvedere se pusieron a dos puntos en la Anual de los del Parque Rodó y tienen chances certeras de llegar a la Copa Libertadores.

El partido fue de ida y vuelta, con buen fútbol. Liverpool salía jugando, tocaba e intentaba llegar con superioridad numérica, pero Defensor lo bancaba bien. Primero la tuvo Álvaro Navarro para los violetas, pero su remate se fue apenas afuera. Luego hubo una chance de Martínez para los locales, pero Guillermo Reyes estuvo rápido para ahogarle el mano a mano.

A los pocos minutos cayó la apertura del marcador. Cristian Souza llegó al área y sacó un derechazo cruzado, potente, inatajable. Luego llegó la expulsión de Santiago Carrera en Defensor. ¿Era para roja? Quedaban pocos minutos para terminar el primer tiempo y los violetas, por si fuera poco, se cargaron de amarillas.

Eduardo Acevedo se vio obligado a reacomodar las piezas tras quedarse con diez en la cancha, y bajó a Ignacio Laquintana a la línea de cuatro final. Así pasó de su 4-4-2 inicial a un 4-3-2 que en los primeros minutos le dio juego ante la pasividad negriazul, pero que luego se fue apagando. Liverpool fue inteligente, esperó al rival, lo contuvo y, cuando pudo, estiró el marcador. A diez minutos del final llegó el golazo que pareció cerrar el juego. Souza la hizo toda por la izquierda y metió un pase para Martínez, quien le rompió el arco a Reyes.

Para el final estaba reservado lo mejor. Defensor descontó y se fue con todo en busca del empate. El gol había caído tras un tiro de esquina muy bien ejecutado que Matías Santos convirtió de cabeza. Los violetas fueron con todo, incluso caminando en la cornisa, porque quedaron mal parados en una jugada en la que su golero fue a cabecear y quedó a mitad de camino. Para peor, el propio Reyes se fue lesionado, por lo que su compañero Mathías Cardacio debió calzarse los guantes. A pesar del sufrimiento, Liverpool ganó bien y se entusiasma con clasificarse para la Libertadores.