La semifinal de 800 metros contó una historia diferente a la que nos hubiese gustado a los uruguayos. Deborah Rodríguez no pudo mejorar su marca personal, terminó séptima en su llave con un tiempo de 2:01,76 y quedó fuera de competencia al no lograr meterse entre las ocho mejores.

La uruguaya, que tiene un récord nacional de 2:00.20, buscaba mejorar ese registro para trepar todas las posiciones que fuera posible y pelear por su oportunidad de alcanzar la final de los Juegos Olímpicos en Tokio. Sin embargo, en una carrera en la que quedó encerrada en el medio del pelotón, careció de su cambio de ritmo habitual y no pudo seguir el paso a las mejores de la prueba durante los últimos 200 metros.

Con esta actuación, terminó en 19º puesto y concretó la actuación en pista más destacada de una mujer en la historia del atletismo olímpico uruguayo. Solamente Estrella Puente, lanzadora de jabalina (prueba de campo), consiguió en atletismo una colocación mejor que la de Déborah, cuando en 1952 terminó en el 10º puesto.

Con la finalización de la actuación de Rodríguez y Lasa, el atletismo celeste espera por María Pía Fernández, quien será la última en participar, de hecho, será la última de toda la delegación uruguaya, compuesta por 11 deportistas.