El Mundial de Qatar marcó cifras históricas en asistencia. El promedio de aficionados por partido fue de 51.000 personas, y también se rompieron récords televisivos en todo el mundo.

El fútbol es cosa seria para Sudamérica. Uruguay es el claro ejemplo: se para el país cuando juega la selección. Los partidos de Uruguay marcaron los picos más altos de audiencia del año en la televisión abierta uruguaya. Teledoce fue el canal que tuvo mayor cantidad de televisiones prendidas a la transmisión de los partidos; en el debut de Uruguay frente a Corea del Sur, los medidores marcaron 27,5 puntos de rating en el total de hogares.

Según datos compartidos por la FIFA, en Argentina, la audiencia media durante el partido frente a México fue de 8,48 millones de personas, lo que significó una cuota de pantalla de 81,3%. La audiencia del partido fue la más alta del torneo hasta ahora en el país, y fue 5% superior a la del primer partido de Argentina contra Arabia Saudita y a la audiencia media de los de la fase de grupos de la Copa Mundial de la FIFA 2018.

Este mismo partido tuvo en México una audiencia nacional de 20,96 millones de espectadores, y la suma de los tres canales que emitieron el encuentro fue de 67,9%, una cifra superior al pico más alto por encuentros del Mundial de 2018.

Asia y Europa conectados

Japón, que hizo un gran Mundial, midió una audiencia promedio de 36,37 millones de espectadores en el encuentro con Costa Rica de la fase de grupos: más de diez millones de los que hubo en la disputa de la selección nipona contra Alemania en su estreno en el torneo y 74% superior a la audiencia media nacional de la fase de grupos de la Copa Mundial de 2018.

En Corea del Sur, 11,14 millones de personas vieron el debut de su selección en el torneo contra Uruguay. La retransmisión registró un aumento de audiencia de 97% en comparación con la media de los partidos de la fase de grupos de la Copa Mundial de Brasil 2014; 18% más que en Rusia 2018.

En Europa, el domingo 28 de noviembre, 65% de las personas que encendieron la televisión en España vieron el enfrentamiento de la roja con Alemania y la audiencia total fue de 11,9 millones, superando la de todos los partidos de la fase de grupos del Mundial de 2018.

En Francia, 14,56 millones vieron a Kylian Mbappé marcar el gol del triunfo ante Dinamarca, en lo que fue el pico de audiencia más alto del torneo en ese país.

En Portugal se rompió el récord de audiencia televisiva en un Mundial durante el partido con Uruguay. Hubo 5,35 millones de televidentes portugueses viendo el encuentro de la selección lusa con la celeste.

En Países Bajos se registró la mayor audiencia televisiva del país en 2022, más de 76,6% de las personas que estaban viendo la televisión miraron el empate 1-1 de Países Bajos con Ecuador. Fue una audiencia superior a la de cualquier partido de la Copa Mundial de 2018.

Récords históricos

Estados Unidos-Inglaterra fue el partido de fútbol masculino más visto de la historia de la televisión estadounidense, con un pico de audiencia de 19,65 millones de espectadores en FOX.

Además, la emisión de Telemundo en Estados Unidos fue la más vista de un partido de la fase de grupos del Mundial de la historia en español en el país, y la segunda más vista de cualquier fase cuando jugaron Argentina y México.

En Canadá, el partido frente a Croacia tuvo 4,33 millones de telespectadores, 12% más que la máxima audiencia combinada en el país en el Mundial anterior.

Hay motivos

Para el presidente de la FIFA, Gianni Infantino –que vio todos los partidos en los estadios–, la buena asistencia y audiencia televisiva que está teniendo este Mundial se explica por la calidad de las selecciones en el juego.

“He visto todos los partidos, y esta ha sido la mejor fase de grupos de un Mundial. Los partidos han sido de gran calidad en grandes estadios, eso ya lo sabíamos. Sin embargo, además, el público que ha estado ha sido increíble. Más de 51.000 aficionados en promedio”, sostuvo el mandatario de la FIFA.

A su vez, Infantino confirmó que hay más de dos millones y medio de personas en las calles de Doha y cientos de miles por día en los estadios. “Es realmente increíble. Todos juntos, animando juntos, apoyando a sus equipos, un ambiente fantástico, grandes goles, una emoción increíble y sorpresas”, agregó.

Este Mundial tuvo la particularidad de que, por primera vez en la historia del torneo, equipos de todos los continentes estuvieron representados en los octavos de final. También fue nuevo que hubieran tres naciones de la Confederación Asiática de Fútbol (AFC) y, por segunda vez, hubo dos de la Confederación Africana de Fútbol (CAF).

“Ya no hay equipos pequeños ni equipos grandes. El nivel es muy, muy parejo. Por primera vez en la historia, también, selecciones nacionales de todos los continentes pasan a la fase eliminatoria. Esto demuestra que el fútbol se está volviendo verdaderamente global. Estoy seguro de que llegaremos a los 5.000 millones de espectadores en todo el mundo. En lo que respecta a la asistencia a los estadios, están llenos prácticamente en todos los partidos”, finalizó.