No hay con qué darle a River Plate. El equipo de Gustavo Díaz está entonado, juega bien, sólido en todos los aspectos, y además tiene a los delanteros en un nivel muy alto. El lunes, en el cierre de la fecha 5, en el siempre difícil estadio Antonio Ubilla, River fue muy superior a Cerro Largo y le ganó 5-0.

Cinco partidos jugados, cinco ganados. Si andará bien River. Ni siquiera sintió la presión de Nacional, que el fin de semana ganó y lo había alcanzado con 12 unidades. ¿Cómo contestó el equipo del Chavo Díaz? Mostrando su mejor versión y ganando ahí donde muy pocos lo hacen.

1. Los picantes

Sobran elogios para el presente (y el futuro) de Thiago Borbas, pero hay que mencionarlo una vez más. Fecha tras fecha el delantero de River sigue destacándose, sea convirtiendo o asistiendo a sus compañeros. Le queda perfecta la 9 que hasta hace nada tenía otro fenómeno, Matías Arezo. Borbas, goleador del Campeonato Uruguayo, fue quien hizo el primero de los darseneros en el Ubilla, marcando diferencias ya en el minuto 7.

Pero no sólo de Borbas vive River. Pablo López, que jugó como de segundo punta, casi que de enlace, tampoco perdonó, y en la primera que tuvo definió perfectamente.

Y los que juegan por afuera son otros de los medulares para que River siga consiguiendo victorias. Jonathan Urretaviscaya desnivela por una banda, Matías Ocampo lo hace por la otra, y si intercambian los lados, también lo siguen haciendo. Ambos participaron en las conquistas del primer tiempo, con Ocampo poniendo el 3-0.

Para mejor, Juan Cruz de los Santos, el juvenil que promete, entró y también convirtió. Es un combo de los mejores el que está viviendo River Plate.

El quinto y último gol de la tarde allá en el noreste fue en contra. Robert Ergas tuvo la mala suerte de meterla en su arco, como para redondear un mal partido de los melenses.

Mirá las tablas

En los del Prado sobran motivos para festejar la punta del Clausura. Pero no es el único: con los tres puntos conseguidos ante Cerro Largo, River alcanzó el cuarto lugar de la tabla Anual, empatando a Peñarol en 45 puntos, pero desplazándolo al quinto lugar por tener mejor saldo de goles.

La seguidilla de puntos del darsenero es brutal. Su última derrota fue hace más de dos meses, cuando perdió 0-1 ante Boston River. En aquel entonces recién iban tres fechas del Intermedio. Después siempre sumó, sea de a uno o sea de a tres, sumatoria que lo deja en esta realidad auspiciosa, más allá de que falte tiempo para que todo se dilucide.