En un encuentro parejo y con un segundo tiempo de juego duro, los juveniles del darsenero dieron la cara y llevaron a su equipo a una importantísima victoria de visitante y en la hora. Gran momento de forma para River Plate que se mantiene como líder del Torneo Clausura con 12 puntos luego de ganar los primeros cuatro partidos del torneo. Además, los dirigidos por Gustavo Chavo Díaz no conocen la derrota desde hace ocho fechas. Fénix, por su parte, sumó su segunda caída consecutiva en el Clausura y perdió el impulso de las dos muy buenas primeras victorias que logró.
En los primeros minutos Fénix tuvo el control de la pelota y River fue más reactivo, buscó lastimar con rápidos contragolpes. Pasaron pocos minutos antes de que una de las fórmulas diera resultado. La joya del darsenero y una de las revelaciones del campeonato, Thiago Borbas, puso en ventaja a su equipo siguiendo el libreto del Chavo Díaz. En una contra rápida que comandó Maximiliano Pereira, Matías Ocampo puso un centro medido al área y Borbas lo remató de cabeza de gran manera: 1-0. El juvenil convirtió su undécimo gol en el Campeonato Uruguayo y empató a Mauro Méndez -que se fue de Wanderers para jugar en Estudiantes de la Plata- como goleador.
El partido continuó con la misma fórmula. El ave controló la pelota, pero no pudo hacerlo pesar en situaciones de peligro, la defensa de River cumplió una gran tarea defensiva y también estuvo rápida para sacar la pelota jugada y generar buenos contragolpes. El darsenero fue más peligroso y pasada la media hora se le presentó la oportunidad para seguir inclinando el encuentro a su favor. A instancias del VAR, Andrés Matonte cobró un penal a favor de la visita por una mano en el área y Borbas tuvo la oportunidad de poner el 2 a 0 para su equipo, pero el golero Agustín Requena atajó la pena máxima y mantuvo con vida a su equipo.
Fénix no dejó pasar la oportunidad, el equipo se transformó completamente luego de sobrevivir a lo que pudo haber sido el golpe de gracia y arrinconó a River. Disputó cada pelota dividida con energía renovada y comenzó ganarlas todas. A base de actitud consiguió lo que no pudo lograr con juego. A nada del final, la insistencia dio frutos: Una nueva mano en el área, esta vez en la de River, hizo que Matonte cobrara el segundo penal de la tarde. Gonzalo Vega lo pateó y puso el 1-1.
El segundo tiempo se volvió de transiciones. Fénix continuó al igual que en el final de la primera mitad, siguió disputando con fuerza e intensidad las divididas y atacó rápidamente cada vez que las pudo ganar. River se recuperó anímicamente y entró en el mismo juego, pero el cambio de dinámica del encuentro no le sentó bien al darsenero, que controló más el partido cuando Fénix apostó por la paciencia y tener más la pelota. Sin claridad y con pocas situaciones de peligro, el ave incomodó cada vez más a la última línea rival.
Lógicamente, el local no podía mantener ese esfuerzo físico por tiempo ilimitado y sobre la mitad del complemento el partido se emparejó. Sin embargo, el juego estuvo lejos de perder combatividad, aumentaron las faltas y los equipos se llenaron de amarillas. Así, ambas áreas recibieron muchos centros provenientes de pelotas quietas que estuvieron lejos de generar cualquier tipo de peligro serio.
Sobre el final, ambos arriesgaron y fueron por la victoria, River fue un poco más claro, pero en el descontrol general pudo pasar cualquier cosa. El mayor control de la visita tuvo premio, en el primer minuto agregado, los cambios le dieron resultado al Chavo Díaz. Otro juvenil, Juan Cruz de los Santos, que ingresó desde el banco en la mitad del complemento, fue el encargado de darle el triunfo agónico a la visita, que supo sobrevivir a los momentos más difíciles del partido y se llevó los tres puntos.