Falta muy poco para que Marcelo Bielsa se convierta en el próximo director técnico de la selección. Tras un par de semanas de trabajo entre la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) y los asesores legales del argentino, el contrato que cerrará su vínculo será enviado este jueves. El ida y vuelta ha tenido ajustes de las dos partes, pero sobre todo atendiendo formalidades que Bielsa puso sobre la mesa. De no mediar ningún inconveniente con el documento enviado, la firma es un hecho.

El acuerdo Bielsa-AUF contempla las Eliminatorias para el Mundial 2026 que se jugará en Estados Unidos, México y Canadá, y la Copa América 2024. En el medio aparece un evento interesante, el Preolímpico para París 2024, y el miércoles trascendió que el Loco Bielsa tendría interés en dirigir la selección sub 23 que jugará dicho torneo. En este último caso habrá que ver cuál es la decisión del Comité Olímpico Uruguayo, el organismo que comanda dicha selección. Vale recordar que uno de los galardones que Bielsa tiene es, precisamente, haberse consagrado campeón olímpico, colgándose la medalla de oro en Atenas 2004 con la selección argentina que integraron Roberto Ayala, Gabriel Heinze, Javier Mascherano, Andrés D’Alessandro, Javier Saviola y Carlos Tévez, entre otros.

Si el acuerdo AUF-Bielsa prospera –la asociación espera que al final de esta semana o en el inicio de la siguiente se concrete–, el rosarino será el segundo director técnico argentino que dirija la selección después de Daniel Passarella, quien estuvo al frente de Uruguay desde 1999 hasta 2001, sin conseguir la clasificación mundialista.

Se podría mencionar en esta lista a Juan Eduardo Hohberg, nacido en Alejo Ledesma, Córdoba, pero el histórico delantero de Peñarol era nacionalizado uruguayo –y llegó a disputar el Mundial 1954 con la celeste–. Hohberg, a diferencia de Passarella, sí llevó a Uruguay al Mundial 1970, en el que alcanzó las semifinales, instancia en la que perdió con Brasil.

Bielsa, por su parte, además de participar en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, clasificó a Argentina a Corea y Japón 2002 –torneo al que llegó como candidata y se despidió en la primera fase, no pasando el grupo– y después estuvo al mando de la selección de Chile, a la que clasificó a Sudáfrica 2010 con los jóvenes Arturo Vidal, Gary Medel y Alexis Sánchez. Esa selección trasandina fue eliminada del Mundial por Brasil, 3-0 en octavos de final.