El Campeonato Uruguayo 2025 se asoma. El hincha está en la etapa de saciar la pasión actualizando las cuentas oficiales de sus clubes para conocer incorporaciones mientras espera que arranquen los entrenamientos y los amistosos.

El torneo en 2024 terminó muy temprano y ya va casi un mes sin actividad por los barrios. Un poco se extraña la cancha, pasear atrás de los colores que te marcan el ánimo con un resultado deportivo. Volver a ver a toda esa gente que siempre habita las mismas tribunas y que se funde en abrazos de hermanos con personas de las que, seguramente, ni siquiera sepa su nombre. Lo irracional de la pelotita y sus vínculos que hay que dejarlos quietos, ahí están bien.

Los que se mantienen poco en el fútbol uruguayo son los entrenadores y sus procesos de trabajo. No hay garantía de éxito por tener uno, pero el común denominador marca que es difícil afianzar ideas y proyectos cuando la vorágine apura al cambio de forma constante. Habrá cinco caras nuevas entre los 16 equipos de Primera División en 2025, pero solamente dos tienen más de un año de permanencia en sus cargos.

Sebastián Díaz (archivo, setiembre de 2024).

Sebastián Díaz (archivo, setiembre de 2024).

Foto: Ignacio Dotti

Sebastián Díaz, en Plaza Colonia, está desde el 27 de agosto de 2023 y es el entrenador que hace más tiempo que está en el mismo lugar. Había tenido un interinato de un encuentro en 2022, ahora lleva 49 encuentros consecutivos. Era ayudante de Adrián Fernández y asumió el cargo con el equipo prácticamente condenado al descenso. En 2024 fue campeón en la segunda división.

Diego Aguirre llegó más tarde. Su segundo pasaje en Peñarol comenzó el 21 de noviembre de 2023 y es el entrenador con más partidos seguidos dirigidos en un club de primera división en este momento; lleva 61. Disputó las finales de 2023, en las que cayó ante Liverpool, y en la última temporada fue el campeón uruguayo y llegó a la semifinal de la Copa Libertadores.

Un año como mucho

Los otros nueve entrenadores que continuarán en su cargo para 2025 llevan un año -o menos- al frente de los equipos. En la prolijidad del calendario el que saca ventaja es Jadson Viera, quien asumió el 1º de enero de 2024 y estuvo todo el torneo al mando de Boston River, donde dirigió 43 encuentros. Lo agarró complicado en el descenso y clasificó a la Copa Libertadores, donde enfrentará a Ñublense.

Antonio Pacheco llegó a Wanderers el 12 de marzo para sustituir a Alejandro Capuccio, dirigió 34 partidos en el bohemio, equipo con el que jugará la Copa Sudamericana. Parecida es la situación de Alejandro Apud, que también obtuvo el boleto al torneo continental de segundo orden, asumió el 15 de abril y dirigió 33 cotejos, uno menos que el Tony.

Martín Lasarte dirigió 28 partidos en Nacional desde que sustituyó a Álvaro Recoba el 17 de junio, sólo perdió dos encuentros, ante San Pablo por la Copa Libertadores y contra Rampla Juniors en el campeonato uruguayo. Su salida parecía un hecho, pero renovó su vínculo y continuará en 2025.

Walter Pandiani y Álvaro Navarro estuvieron 23 partidos en Miramar Misiones y Defensor Sporting, respectivamente. Los dos tuvieron una campaña positiva. El Rifle llegó el 27 de mayo, fue el quinto entrenador del cebrita en la temporada y logró mantener la categoría. El Chino se sumó al violeta el 8 de julio luego de la sorpresiva salida de Martín Varini, fue campeón de la Copa Uruguay y clasificó a la Libertadores.

El primer día de agosto volvió Danielo Núñez a Cerro Largo, fue su sexto pasaje por la institución. Si bien en este periplo lleva 16 encuentros, es un hombre totalmente identificado con la institución y el pueblo arachán. Se habían ido casi todos los jugadores del plantel y, aun así, logró rearmarse para llegar a la Copa Sudamericana.

El argentino Diego Monarriz llegó a Juventud de Las Piedras en la recta final, asumió el 3 de octubre y dirigió 12 partidos, con los que consiguió el ascenso. El último en llegar fue Joaquín Papa a Liverpool, donde sólo estuvo siete encuentros, luego de que sustituyó a Emiliano Alfaro el 17 de octubre.

Los nuevos

Darío Rodríguez, luego de su experiencia en Peñarol, dirigirá a Racing en lugar de Eduardo Espinel. Otro que tuvo pasaje por el carbonero es Diego Memo López, que ahora dirigirá a River Plate en lugar de Francisco Palladino.

Una cara totalmente nueva para el fútbol uruguayo es la de Martín Cicatello, argentino de 43 años que llegará a Montevideo City Torque. Además, Javier Méndez dirigirá a Progreso, llegó para sustituir a Carlos Canobbio, que, hasta el momento, era el entrenador récord con dos años y medio de permanencia en su cargo en el equipo de La Teja.

El único equipo que no tiene entrenador definido hasta el momento es Cerro.