Diego Aguirre, el entrenador de Peñarol, habló en una conferencia de prensa tras el triunfo de su equipo ante Liverpool por la Copa Uruguay en el Campeón del Siglo, una victoria que selló un partido muy particular, cargado de incidencias cruciales que resultaron en un enfrentamiento de siete jugadores contra diez a favor del conjunto local.

Así como para todos los espectadores, para Aguirre fue “un partido bastante extraño”. “La sensación es rara porque el partido no se pudo jugar prácticamente, fue muy cortado, hubo muchas situaciones de VAR, de polémica, de expulsiones, mucho viento que molestó bastante. Lo que tenía que haber sido un partido muy lindo y disputado no lo fue, queda para el olvido”, comentó el entrenador.

Por ese motivo, le fue difícil analizar en detalle el rendimiento del equipo. “Nuestro equipo hizo cosas buenas, pero no pudimos tener una continuidad por todo lo que pasó”. En ese contexto, para Aguirre “hubo un exceso desmedido de faltas peligrosas que pudo lastimar al adversario y no lo comparto. Una cosa es la agresividad y otra el exceso, que puede generar cosas feas. No me gustó, fue muy desmedido”, explicó.

Para el DT, el equipo aurinegro podría haber sellado el triunfo mucho antes de lo que lo hizo: “Tendríamos que haberlo liquidado. Nos faltó concretar, tuvimos situaciones bastante claras que perdimos. Era para ganarlo con otra tranquilidad. Son partidos raros, la diferencia de hombres te puede jugar en contra si te confiás y no es así. Me hubiera gustado haber hecho algún gol más”, agregó.

En ese sentido, la Fiera se lamentó por no poder sacar conclusiones del encuentro, pero considera que “tiene que servir de experiencia” porque “puede volver a pasar” el hecho de tener encuentros de alto voltaje, sobre todo teniendo en cuenta que Peñarol tiene por delante la Copa Libertadores. “Tenemos que saber no entrar en situaciones que nos quitan la posibilidad de jugar, tenemos que darle continuidad al juego y fue lo que menos pasó. Me imaginaba un partido que no pasó, rescato el resultado. Siempre hay cosas buenas para sacar como conclusión, pero es un partido para dejar atrás y mirar lo que viene”, sostuvo.

“Ahora vamos a seguir trabajando por hacer un buen partido al comienzo del campeonato”, dijo Aguirre sobre el próximo partido que tiene enfrente, ante Cerro Largo por la primera fecha del Torneo Apertura.

El período de pases termina este fin de semana y Aguirre todavía tiene la posibilidad de incorporar algún jugador. Por lo pronto, sabe que algunas de las fichas que se sumaron al equipo son muy admiradas por la hinchada, como es el caso de Gastón Ramírez: “Me genera satisfacción cuando aplauden a todos los jugadores. Gastón de a poco se va afianzando y va mostrando su calidad, esperamos que pueda seguir así”, expresó.

Consultado por el arbitraje, la Fiera recordó que no habla de los árbitros: “Hoy en día es todo más fácil de analizar, después vamos a ver los fallos. A veces es difícil estar ahí en el campo”.

La pelota como trofeo

Leo Fernández también habló con los medios luego del partido en el que facturó tres goles, para lo que le sirvió “el empuje que nos estaba dando la gente”. El delantero aurinegro se llevó la pelota para su casa.

“Se notó que estábamos los dos queriendo ganar el partido. Eso no sólo se gana jugando, hay que meter un poco”, sostuvo, a la vez que analizó el comportamiento del rival: “Ellos vinieron a eso, eran la mayoría jóvenes y me sorprendió que estaban todos con ganas de pelear. Sentí que estaban sobrepasados, por la edad capaz. Es un pensamiento mío, pero como que estaban sobregirados. No creo que haya mala intención, son cosas del partido que quedan ahí”, alegó.

Peñarol también tuvo sus infracciones, pero el entrenador estuvo atento para calmar al equipo: “Error nuestro que nos metimos un poco en eso. Para el segundo tiempo Diego habló y nos acomodamos un poco más. En el juego nos sentimos bien; más allá de los expulsados, nos sentimos superiores. Vamos encaminados a un buen trabajo”, declaró Fernández.