A principios de diciembre se sortearon los grupos del Mundial de Clubes, que por primera vez tendrá 32 participantes y se disputará al estilo de los campeonatos del mundo de selecciones.
El 21 de marzo explotó el primer conflicto respecto a los clasificados cuando la FIFA excluyó a León de México del torneo. La decisión se basó en el artículo 10, apartado 4, del reglamento del certamen. Ahí se explica que no pueden participar dos clubes con el mismo dueño.
León, donde milita el volante uruguayo Nicolás Fonseca, comparte propietario con Pachuca, también clasificado. Ambas instituciones pertenecen a la misma sociedad anónima deportiva.
El felino mexicano recurrió al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) para revocar la decisión, pero recién tiene fecha de audiencia para el próximo 23 de abril, por lo que la resolución podría demorar. La FIFA, en tanto, dio el paso de anunciar los posibles reemplazantes para el torneo que comenzará el 15 de junio.
La idea inicial es disputar un partido único entre América de México, último campeón de la liga de su país, y Los Ángeles FC, subcampeón de la Liga de Campeones de Concacaf. El ganador de ese encuentro -que aún no está confirmado- se sumaría al grupo D junto a Flamengo de Brasil, Esperance de Túnez y Chelsea de Inglaterra.
América tiene en su plantel a los uruguayos Sebastián Cáceres, Brian Rodríguez y Rodrigo Aguirre, todos integrantes de la selección de Marcelo Bielsa. En el elenco estadounidense no hay futbolistas compatriotas.
La idea de FIFA es que el sustituto de León sea de la misma confederación. Para eso se procederá a formalizar la invitación y que ambos clubes lo acepten. De todas formas, si la resolución del TAS es en tiempo y forma, y a favor de León, el equipo mexicano podría mantener su cupo en el máximo torneo a nivel de clubes.