El dato

El gobierno proyecta que se produzca una mejora del resultado global del sector público no monetario, sin considerar a los cincuentones (de aquí en adelante “sector público”), de aproximadamente 700 millones de dólares (1,0% del PIB) entre 2019 y 2022. Durante estos años se proyecta que el pago de remuneraciones y pasividades caiga en idéntica magnitud en términos del PIB, 0,5% en cada caso, totalizando unos 700 millones de dólares.

Foto del artículo 'Gráfico de la semana: apuntes sobre la mejora del resultado fiscal'

El contexto

¿De dónde proviene esta información?

En ocasión de la Rendición de Cuentas, el MEF actualizó sus proyecciones fiscales para el resto del período de gobierno. Para este período se prevé que el resultado global del sector público mejore 1,0% del PIB en 2022 respecto a 2019. El resultado del sector público es la suma de los resultados del Gobierno Central y BPS, Empresas Públicas, Intendencias y BSE. El Gobierno Central y BPS explican el 70% de la mejora del resultado fiscal.

¿Cómo se comportan los ingresos?

Los ingresos del Gobierno Central y BPS caen -0,8% del PIB entre 2019 y 2022. Los ingresos del Gobierno Central disminuyen -0,3% del PIB, pese a que la presión impositiva de DGI aumenta 0,2% del PIB por las subas del IVA, del IRPF y del IASS decretadas durante este gobierno. Los ingresos del BPS se contraen -0,5% del PIB producto de la caída del salario real: -4,1% respecto al promedio de 2019.

¿Qué explica la caída de los egresos?

Los egresos del Gobierno Central y BPS caen por el deterioro de las remuneraciones y de las pasividades (-0,5% del PIB en cada caso), por menores transferencias al Fonasa y a las AFAP (-0,6% del PIB), y por menores inversiones (-0,2% del PIB). La única línea que aumenta son los gastos no personales (donde se incluyen los gastos transitorios vinculados con la covid-19) y los pagos por disponibilidad de las PPP (0,4% del PIB en total).

¿Qué pasará con el resto del sector público?

Para el resto del sector público, el gobierno espera un aumento de las contribuciones de las intendencias de 0,2% del PIB, mientras que no plantea que se produzcan diferencias en los resultados de las empresas públicas y del BSE respecto a 2019.

¿Y para 2025?

El gobierno proyecta una mejora adicional del resultado fiscal del sector público de 1,3% del PIB respecto a 2022, en buena medida producto de la baja de los gastos no personales canalizados por el Fondo Covid (-0,9% del PIB), que ya no tendrían lugar por el fin de la pandemia. Para los salarios y las jubilaciones se proyecta que no recuperen el terreno perdido desde 2020 en términos del PBI.