Elevar a más mujeres a los rangos más altos de las empresas no se trata sólo de igualdad, se trata de rendimiento. El liderazgo y el espíritu empresarial de las mujeres desempeñan un papel fundamental en el impulso del crecimiento económico y la creación de empleos con efectos indirectos sociales, ambientales y climáticos positivos.
¿Cómo podemos cumplir con los objetivos climáticos del mundo? Podemos empezar por poner a más mujeres a cargo. Eso nos dará una posibilidad mucho mejor no sólo de controlar el calentamiento global, sino también de alcanzar una mayor prosperidad en el proceso.
Están apareciendo investigaciones que subrayan el justificativo comercial, y, en términos de desarrollo, para aplicar una lente de género a las inversiones relacionadas con el clima. Estas investigaciones también destacan el papel crítico que desempeñan las mujeres en la conducción en materia climática. Un informe reciente del Fondo Europeo de Inversiones1 muestra que las empresas lideradas por mujeres tienen mejores resultados ambientales, sociales y de gobernanza (ESG, por su sigla en inglés) que otras empresas, y que las compañías con una mayor representación femenina en los cargos de liderazgo tienen mejores antecedentes en cuanto a adoptar prácticas amigables con el medioambiente.
Al mismo tiempo, es más probable que las líderes mujeres inviertan en energía renovable, lo que se traduce en menores emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y en mejores resultados ambientales. También es más factible que las empresas que son propiedad de mujeres promuevan una mayor eficiencia energética y prácticas como el reciclado. Los bancos dirigidos por mujeres les prestan menos a los grandes contaminadores.2
En el lugar de trabajo, el liderazgo de las mujeres está asociado con una mayor transparencia con respecto a la huella ambiental, y se sabe que un porcentaje mayor de mujeres en un directorio corporativo se correlaciona de manera positiva3 con una divulgación apropiada de las emisiones de GEI. Una masa crítica de mujeres en un directorio lleva no sólo a mejores resultados climáticos, sino también a más innovación. Considerando estos hallazgos, no sorprende que las ciudades más sustentables del mundo estén gobernadas por mujeres.
Sin embargo, si bien más de una quinta parte de las corporaciones importantes han prometido alcanzar emisiones cero netas en 2050, son muy pocas las que toman medidas explícitas para incluir mujeres en sus planes y procesos de toma de decisiones en relación a la acción climática. Si lo hicieran, tendrían una oportunidad mucho mejor de alcanzar sus objetivos.4
La presencia de más mujeres en los altos cargos de las empresas no tiene que ver sólo con la igualdad, también con el liderazgo y la iniciativa empresarial, que juegan un papel crítico a la hora de impulsar el crecimiento económico y crear empleos con consecuencias sociales, ambientales y climáticas positivas. Pero las mujeres siguen enfrentando barreras más costosas desde un punto de vista económico y social para crear y hacer crecer un negocio que los hombres. Si bien la iniciativa empresarial femenina está creciendo en todo el mundo, los propietarios varones de empresas todavía tienen una ventaja de tres a uno sobre las propietarias mujeres.5
Según una investigación reciente del Departamento de Economía del Banco Europeo de Inversiones (BEI), sólo 36% de todos los empresarios en la Unión Europea son mujeres, en parte porque tienen más dificultades que los hombres en lo que concierne al financiamiento de sus empresas.6 Si bien las compañías financiadas por mujeres reciben más apoyo público, generalmente este apoyo se presenta en forma de préstamos para startups, mientras que el acceso a un rango más amplio de financiamiento para el crecimiento sigue siendo limitado. En Europa, sólo 2% del capital invertido está destinado a equipos con financiamiento absolutamente femenino y sólo 5% va a equipos mixtos. Los equipos integrados sólo por hombres obtienen un porcentaje sorprendente: 93%.
Las consecuencias de esta disparidad tienen un amplio alcance. Es más probable que las mujeres dueñas de empresas empleen y retengan a otras mujeres y que mejoren las capacidades de los empleados invirtiendo en capacitación. Según el BEI, 47% de las empresas de propiedad de mujeres tiene más de 50% de empleadas mujeres, comparado con sólo el 26% de las empresas cuyos dueños son hombres.
El cambio hacia una economía más ecológica y más digital puede abrir más oportunidades para las mujeres, porque las empresas que persiguen esos objetivos también tienden a crecer de manera más dinámica, lo que, a su vez, genera empleos y ayuda a implementar prácticas que promueven la paridad de género. Asimismo, existe evidencia de que, muchas veces, son mujeres las que están detrás del lanzamiento de empresas ecológicas.
Más allá de aumentar la cantidad de mujeres en los cargos gerenciales corporativos, también necesitamos más líderes mujeres en otras partes de la economía. Las inversoras mujeres, por ejemplo, son cada vez más importantes, porque tienen una mayor preferencia que los hombres por inversiones que hagan foco en los factores ESG. Si respaldamos a las mujeres como inversoras, gestoras de fondos y empresarias, tendremos mejores chances de acelerar las soluciones climáticas -muchas de las cuales exigen inversiones de gran escala-.
Como demuestra la Guía de Finanzas Climáticas con Perspectiva de Género de 2xCollaborative, hay muchas maneras de garantizar que las mujeres desempeñen un papel más relevante, desde tener más mujeres desempeñándose en cargos altos en el sector de servicios financieros hasta apoyar a las inversoras mujeres y ayudar a las consumidoras mujeres a ecologizarse. A las mujeres les interesa la sustentabilidad y, como por lo general son el “oficial jefe de compras” de los hogares, es a ellas a quienes tienen que llegar los mercadólogos dedicados a productos amigables con el clima. Por lo tanto, la Alianza Financiera para Mujeres, una red global de 90 instituciones financieras importantes, está explorando la manera de ecologizar la propuesta de valor al cliente para las mujeres en un rango más amplio de productos y servicios.
De la misma manera, como parte de su nuevo compromiso para vincular el género y las finanzas, la Bolsa de Luxemburgo ha comenzado a poner el foco en instrumentos de deuda sostenibles que fijen metas de igualdad de género o recauden fondos para proyectos que defiendan la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres. Son medidas simples que pueden hacer que a los inversores les resulte mucho más fácil identificar bonos con perspectiva de género.
Ahora bien, los responsables de las políticas también deberían hacer algo más para aumentar la participación de las mujeres en la transición verde. Pueden hacerlo ofreciendo una atención infantil asequible y de alta calidad a los padres, aumentando el respaldo a las empresas que son propiedad de mujeres, expandiendo las oportunidades financieras y para establecer redes con las que cuentan las empresas gestionadas por mujeres y que son propiedad de mujeres, e implementando medidas para eliminar la brecha de género en las industrias tecnológicas.
Debemos eliminar las barreras económicas que enfrentan las mujeres y, al mismo tiempo, brindar los recursos y el apoyo que necesitan para triunfar. Con más mujeres en puestos de liderazgo comercial, podemos crear un mundo más equitativo para todos y brindarle mejores chances de supervivencia a la humanidad.
Barbara Balke es secretaria general del Banco Europeo de Inversiones. Thomas Östros es vicepresidente del Banco Europeo de Inversiones. Copyright: Project Syndicate, 2023. www.project-syndicate.org.
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Female access to finance: a survey of literature. Fondo de Inversión Europea, documento de trabajo 2023/87. ↩
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Banks run by women lend less to big polluters, ECB study finds. Bloomberg. ↩
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Explainer: Why women need to be at the heart of climate action. ONU Mujeres. ↩
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A fifth of world’s largest companies committed to net zero target. Forbes. ↩
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Here’s what women’s entrepreneurship looks like around the world. Foro Económico Mundial. ↩
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Support for female entrepreneurs: Survey evidence for why it makes sense. Banco de Inversión Europeo. ↩