Sociedades, comunidades, instituciones y personas festejan sus aniversarios. Son prácticas saludables y necesarias que cruzan a las culturas y a las afiliaciones. En Eduy21 estamos celebrando alegre y esperanzadamente nuestro primer año y poco de vida. Lo hacemos retemplando las confianzas y los ánimos, revisando y proyectando lo actuado, y mirando al futuro con optimismo, cariño y determinación. Permítanos compartir algunas pinceladas sobre lo que somos y hemos venido transitando como razón de nuestro ser y hacer.

En primer lugar, Eduy21 nace desde la radicalidad y la pluralidad de un espíritu cívico, republicano, ciudadano y componedor que aspira a contribuir a posicionar la educación como el tema país para desarrollar y lograr una sociedad de oportunidades y de bienestar con independencia de orígenes, identidades, contextos y situaciones. Valorizamos y nos basamos en los acervos y registros que, a lo largo de nuestra historia y en clave comparada internacional, nos han destacado como país en sentar bases genuinas de justicia, equidad y desarrollo. Hoy esas bases necesitan reinventarse no para renegar del pasado o del presente, o acaso sindicarlos en un sentido u otro, sino para forjar un porvenir promisorio que responda a una asignatura pendiente de larga data: la de facilitar una oportunidad real de educarse y de aprender a cada niña, niño, adolescente y joven. Estamos en clara deuda con los más vulnerables por su corta edad y su contexto social, tanto por no aumentar sustancialmente las oportunidades de aprendizaje ni por cerrar las enormes brechas de aprendizaje entre los sectores de mayores y de menores ingresos del país.

En segundo lugar, y a la luz del espíritu que mencionamos, unas 80 destacadas personalidades del mundo de la educación, de la cultura, de la academia y de la producción convergieron en la necesidad de promover un cambio profundo, sistémico y sustentable de la educación y del sistema educativo. La diversidad de credos, afiliaciones, enfoques, profesiones y rubros de actividades que singularizan la conformación de la Comisión Directiva y el Comité Académico de Eduy21 son una formidable ventana de oportunidades para convocar, escuchar e integrar distintas sensibilidades en una propuesta potente de cambio educativo. En Eduy21 no creemos ni en los pensamientos únicos ni en las acciones monolíticas, supuestamente ambientadas y tentadas por pretendidas hegemonías, sean del signo que sean.

Somos conscientes que los procesos de cambios educativos, piloteados con liderazgo político y técnico unitario y potente, deben hacer –es un imperativo ético insoslayable– el mayor de los esfuerzos por convocar, entusiasmar, comprometer y generar desde el respeto y la consideración de todas las voces sin prejuzgamientos ni bloqueos. Bebemos de la idea del ilustre pensador francés Edgar Morin, que señala que no hay diversidad sin basamento de unidad, pero tampoco hay unidad sin reconocimiento de la diversidad. La unidad y la diversidad como pensamiento y praxis van de la mano en educación.

En tercer lugar, Eduy21 se suma decididamente a una creciente voz ciudadana que se compromete y exige una nueva generación de políticas públicas sobre los temas claves que hacen al bienestar individual y colectivo de la sociedad. Mayor profundidad, integralidad y capacidad de riesgo para sostener políticas de largo aliento, genuino involucramiento ciudadano y comunitario, alineamiento de los recursos e instrumentos con las propuestas de cambio educativo, y efectiva rendición de cuentas transversal a todos los niveles en que se gesta y se desarrolla la política pública están crecientemente pautando la agenda social y, en particular, la educativa. Eduy21 asume su cuota parte de responsabilidad en aportar a esta agenda. No lo hacemos desde la facilidad o si se quiere la comodidad de la apología o de la denuncia, que no diferencia matices, no tiene rigor analítico, cierra puertas y bloquea acuerdos. Nos mueve un espíritu inclusivo y articulador de promover, producir y compartir propuestas para que el país pueda recobrar la confianza en la educación como una vía fundamental para el logro de una sociedad de oportunidades justas, equitativas y sostenibles. Sin una confianza recreada y legitimada entre la educación, el sistema político y social, la sociedad civil y la ciudadanía, no hay construcción ni rutero posibles, así como tampoco se vislumbra un futuro promisorio.

En cuarto lugar, Eduy21 trabaja duro y parejo convocando, escuchando y comprometiendo a educadores y alumnos, ciudadanos a pie, sociedad civil, políticos, empresarios, sindicatos y comunicadores para sumar a un proceso de cambio educativo a escala nacional. Estas fueron algunas de las actividades realizadas: (i) pusimos en marcha la elaboración de una propuesta de cambio, transversal a la educación y al sistema educativo, en base al trabajo de nuestro Comité Académico; (ii) implementamos el programa Formar y Aprender con talleres para educadores y conferencias públicas sobre temas de actualidad, convocando a destacados especialistas nacionales e internacionales; (iii) contamos con columnas de opinión en diversos medios de comunicación para informar un debate ciudadano plural y propositivo; (iv) promovemos la construcción de instancias territoriales –Cabidos Eduy21– ya funcionando en Cerro Largo, Colonia, Florida, Maldonado, Paysandú y Salto, que convocan a diversidad de actores e instituciones locales para compartir propuestas y experiencias; y (v) iniciamos un ciclo de mesas redondas para discutir las propuestas que planteamos contando con el coauspicio de las fundaciones de los partidos Frente Amplio, Nacional, Colorado, Independiente y Por La Gente, y convocando a diversidad de actores de dentro y fuera del sistema educativo. En quinto lugar, Eduy21 está comprometido, tal como se ha señalado, con elaborar una propuesta de cambio educativo con el horizonte de tiempo de una década. Partimos del supuesto de que sin un cambio profundo y de largo aliento de la educación y del sistema educativo en su conjunto, Uruguay no se recrea ni se sostiene como una sociedad de oportunidades justas y genuinas.

Durante 2017 los integrantes del Comité Académico produjeron una serie de documentos sobre diseño curricular y estrategias pedagógicas, gestión de centros, evaluación de aprendizajes, políticas docentes y dimensión socioeducativa del sistema educativo que son la base de referencia para la elaboración de la propuesta de cambio educativo. Esta se compone de tres partes: (i) “Una evaluación del sistema educativo desde sus indicadores tradicionales”, que evidencia la necesidad del cambio triangulando fuentes de información bajo una perspectiva comparada regional e internacional, e identifica el núcleo de temas críticos y sensibles que forman la agenda de cambio; (ii) “Las bases y orientaciones estratégicas del cambio”, que desmenuza los fundamentos y los ejes centrales del para qué y el qué del cambio en el marco de una perspectiva de cambio sistémico y transversal al sistema educativo; y (iii) “Del conjunto de propuestas que efectivizan el cambio”, que pone a discusión un conjunto integrado de iniciativas que abordan la gobernanza del sistema educativo en su conjunto así como aspectos medulares de la gestión institucional, pedagógica y docente con foco en los centros educativos. Se espera tener pronta la propuesta para el primer semestre del 2018 e iniciar, entonces, un proceso intenso de consultas y validaciones a escala nacional involucrando a todo quien quiera participar o tenga un decir en educación.

La propuesta de Eduy21 se resume en cuatro aspectos fundamentales:

(i) la conformación de un marco educativo, curricular, docente y pedagógico para las edades de tres a 18 años, sustentado en un conjunto de competencias y saberes para apoyar la vida de las personas y en sociedad, la formación ciudadana y el trabajo a la luz de cambios disruptivos a escala planetaria que redefinen las bases de la civilización y de la identidad del ser humano;

(ii) una nueva forma de organizar la enseñanza mediante una educación básica de tres a 14 años que englobe los niveles de inicial, primaria y ciclo básico medio, y una educación de jóvenes de 15 a 18 que integre la formación secundaria y técnico-profesional, que son visualizadas como las palancas fundamentales para que los docentes de los diversos niveles compartan maneras de educar y de evaluar, así como de garantizar la unicidad y progresividad de los aprendizajes en las edades de tres a 18;

(iii) que cada centro educativo, con independencia de su modalidad de gestión, pueda localizar la propuesta educativa –el símil de un vestido o traje a medida– contando con marcos normativos, márgenes de decisión, instrumentos efectivamente facilitadores, recursos y mecanismos de rendición de cuentas para efectivizarla; y

(iv) que todo el andamiaje del sistema educativo, en su gobernanza, gestión y recursos humanos y financieros, esté alineado a lograr que el docente sea un empoderado y efectivo tomador de decisiones en el aula, y que el alumno protagonice y se responsabilice por sus aprendizajes.

En sexto y último lugar, somos conscientes de que nos queda una enormidad por hacer. En 2018 tenemos que multiplicar exponencialmente nuestra capacidad de convocatoria y de llegada a la ciudadanía. Debemos profundizar en nuestros canales de comunicación con los sectores políticos, sociales y productivos. Tenemos claridad y determinación en que nuestro mayor desafío es lograr que el sistema político se apropie de una hoja de ruta del cambio educativo y que desde la sociedad civil y la ciudadanía lo ayudemos a hacer.

Es fundamental que la ciudadanía se informe y sea parte del cambio. Las puertas están abiertas en las redes sociales y en nuestra página web. Necesitamos crecer en voluntades, voces y manos que se sumen a la correntada del cambio para que, volviendo a lo que señalábamos al inicio del artículo, cada niño, niña, adolescente y joven tengan una oportunidad real de educarse y de aprender bajo el abrigo de una sociedad justa y de cercanías. Redoblamos nuestro compromiso de seguir recorriendo la República militando por el cambio. Se nos va la vida como sociedad y país. Vamos que vamos.

Mag. Renato Opertti Integrante de Eduy 21.