Según valoró el integrante del Consejo de Educación Secundaria (CES) Javier Landoni, la situación edilicia de los liceos públicos uruguayos “ya no es un problema” en comparación con lo que ocurrió años atrás, cuando este tema era colocado en la agenda pública previo al inicio de clases. En diálogo con la diaria, Landoni señaló que “basta con ir a los liceos” para cotejarlo, y evaluó que ello se debe principalmente a dos motivos: la inversión “millonaria” del gobierno central en obras y la “experiencia” que ha ido adquiriendo el CES en la materia.

Respecto del primer punto, el consejero indicó que “la inversión de estos últimos años es la más grande en la historia de la educación pública después del [primer] batllismo, con la creación de los liceos departamentales”. Sobre el segundo motivo, Landoni aseguró que el CES “ha aprendido a trabajar muy fuertemente con las empresas” y que, por ejemplo, años atrás “era impensable prever que habría mecanismos de prevención en seguridad y de nuevas tecnologías” que permiten compatibilizar obras con clases, incluso en liceos grandes. Landoni habló de 2012 como un hito, ya que en ese año quedó a cargo del plan de obras para secundaria, que sirvió para ir regularizando la situación de varios liceos en los que no se trabajaba en las mejores condiciones, aunque advirtió que en una institución tan grande siempre habrá obras y arreglos en los cuales trabajar. Explicó que en el plan se incluye también el mantenimiento de los edificios, algo que no estaba previsto anteriormente. El consejero agregó que junto con la Federación Nacional de Profesores de Enseñanza Secundaria se instaló un equipo de trabajo que hace un seguimiento de los centros educativos.

Entre algunas obras a destacar, Landoni nombró la de un edificio nuevo para el liceo 22 de La Teja, “que esperamos desde hace 50 años”, y la construcción de un centro educativo nuevo, el liceo 77, próximo a Punta de Rieles. Además, habló de la división del liceo 19 de la Curva de Maroñas, donde se atendía “el ciclo básico más grande del país” y ahora habrá dos liceos, también con bachillerato, que ya estarán prontos para el comienzo de cursos.

En cuanto a las obras en el interior, destacó la construcción de un nuevo local para el liceo de Pueblo Sequeira, en Artigas, “pensado para un espacio en donde la población liceal puede ser fluctuante y que se puede transformar en un lugar de recreación, de deporte o para el arte”. Además, dijo que para finales de 2019 está previsto que se entregue el nuevo local para el liceo 2 de Toledo y que también hay novedades en Dolores, cuyos liceos fueron afectados por el tornado de 2016. Según adelantó, el liceo 1 de esa ciudad ya se mudó a un nuevo local y el 2, que está siendo reconstruido, podrá ser habitado en el correr de 2019. Más allá de los daños provocados por el tornado, Landoni señaló que los locales de los liceos de la ciudad estaban “bastante abandonados” desde antes.

El consejero dijo que, pese a que hay obras en todo el país, “a diferencia de otros años, vamos a tener menos obras que retrasen el inicio de cursos”. Además, señaló que “casi todas” las propuestas de obras por la modalidad de participación público-privada son para sustituir los edificios en donde funcionan liceos que no fueron originalmente pensados para centros educativos, como pretende el CES.