Los docentes de la Universidad Tecnológica (Utec) pasan a fin de año por un sistema de evaluación acordado en reuniones bipartitas y, con base en los resultados, se renuevan los contratos o se terminan. El Sindicato de Trabajadores de la Utec (Situtec) se declaró en preconflicto la semana pasada, y advirtió sobre lo que considera casos de “despido arbitrario” y “hostigamiento sindical” que afectan a dos docentes cuyas evaluaciones estuvieron envueltas en conflictos entre las partes.

El presidente del Situtec, Marcelo Ubal, relató a la diaria cuáles son las dos situaciones que llevaron al sindicato a declararse en preconflicto. Por un lado, está el caso de Silvia Benítez, dirigente sindical y docente en el Instituto Tecnológico Regional (ITR) Centro Sur, de Durazno, a la que se desvinculó de la Utec el 16 de junio, cuando aún estaba pendiente que se resolviera su evaluación de diciembre de 2019 y una investigación por acoso que ella presentó en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS).

Todos los docentes deben completar su propia autoevaluación, que luego se agrega al reporte de su superior. Cuando los puntajes no coinciden y no se llega a un acuerdo, se llama a un tribunal de alzada compuesto por un representante del Consejo Directivo Central provisorio (CDCp) de la Utec, otro del trabajador evaluado y un tercero acordado por las partes.

Ubal detalló la situación de Benítez: “En diciembre el jefe la evaluó con un 2 ‒el puntaje va del 1 al 5‒ y como no coincidió con su autoevaluación se llamó a un tribunal de alzada. Como no nos pusimos de acuerdo sobre la tercera persona para conformar el tribunal, esto se elevó al consejo para buscar una solución y el caso todavía sigue abierto”.

Sobre este punto, el consejero de la Utec, Rodolfo Silveira, dijo a la diaria que “el tribunal no puede seguir pendiente para siempre porque no se llega a un acuerdo sobre las personas”, y agregó: “Sin ninguna duda teníamos elementos para tomar la decisión de no renovar el contrato. Cuando el tribunal de alzada, que es un mecanismo administrativo, no llega a los plazos, se tiene que actuar”. Agregó que se trata de “una funcionaria que recibió un acompañamiento para mejorar su desempeño porque se había detectado que tenía dificultades”.

En un comunicado interno al que accedió la diaria, el CDCp señala que “se han realizado hasta el presente más de 5.000 evaluaciones de desempeño, de las cuales se calificaron como insatisfactorias sólo 35, y que “se han celebrado 1.024 contratos a término” de los cuales sólo 13 no se renovaron, “o sea, que se renovó más de 98%”.

Para el sindicato no es correcto el proceder del CDCp, no sólo porque correspondería conformar el tribunal de alzada y atenerse a su veredicto, sino también porque hay una denuncia de acoso de por medio. Sobre esto Ubal explicó: “La docente hizo una denuncia de acoso a la directora del ITR Centro Sur en la comisión bipartita de acoso de la Utec. Con eso en marcha, el superior de ambas, que está en Montevideo, decidió suspender a Silvia Benítez. El sindicato protestó, se fue a reunión bipartita y se llegó a un acuerdo de desestimar la suspensión”.

El sindicato reforzó después la denuncia de acoso en el MTSS, que exigió crear una comisión interna en la Utec para resolver la situación. “El equipo interno investigó y laudó que efectivamente no hay acoso y que la directora no cometió ninguna falta. Sin embargo, el MTSS constató irregularidades en ese informe y lo desestimó, por lo que empezó una investigación particular a cargo de funcionarios del ministerio que aún está en curso”, dijo Ubal.

Para el consejero de la Utec “si no hay acuerdo y no se aceptan las condiciones [el caso] quedará abierto a mecanismos que no sean de la Utec” a los que pueda recurrir la ex funcionaria. Según Ubal, el sindicato reclama “una evaluación con todas las garantías”.

El otro caso

Además de la de Benítez, hay otra situación que puso en alerta al Situtec. Gustavo Suárez, también docente del ITR de Durazno y dirigente sindical, tuvo problemas en su evaluación de fin de año. En este caso también se llamó a un tribunal de alzada, que esta vez sí se pudo concretar, y que falló a favor del docente. Encontró elementos para desestimar el informe negativo y aconsejar su recontratación.

Sin embargo, el CDCp de la Utec resolvió anular el informe del tribunal de alzada, “con el argumento de que se excedió en sus competencias”, según afirmó Ubal. Por eso se le renovó el contrato a Suárez sólo por seis meses y se le asignó otro docente evaluador, que, al entender del sindicato, “responde al jefe, que fue el que le hizo el informe negativo en primer lugar”.

Silveira defiende esa decisión porque “las competencias que tiene el tribunal son las de verificar que los procedimientos fueron bien hechos”, no de juzgar la evaluación en sí. “De todas formas nosotros coincidimos en que podía haber distintas interpretaciones acerca del reglamento, por eso es que se renovó por seis meses y se cambió al evaluador para que no haya ninguna animosidad. Si en esta nueva evaluación el docente anda bien, será renovado”, agregó. “Es difícil que sean creíbles las interpretaciones que hace el sindicato, como las que hay persecución sindical”, dijo Silveira, y agregó: “Ni siquiera conozco al nuevo evaluador”.

El Situtec ahora continuará “los procesos legales necesarios” asesorado por el PIT-CNT, según informó Ubal. Pidió una bipartita para seguir trabajando estos dos casos y espera la respuesta. La primera comunicación que recibió fue un comunicado interno, en el que el CDCp afirma, entre otras cosas, que “respalda a las jefaturas” que “han actuado con lealtad, calidad, eficiencia y profesionalidad” y que “así como no permitirá ningún abuso de poder por parte” de esas autoridades, “también exigirá a todos los colaboradores que se respeten los principios que rigen la función pública, incluyendo los elementales deberes de trato respetuoso hacia los superiores”.

Para Ubal, ese comunicado tiene “un claro tono intimidatorio” que busca “debilitar” al sindicato. Además, cuestiona que el texto no mencione a otro sindicato que hay en la universidad, que también ha hecho reclamos por temas parecidos. Según Silveira, la respuesta está dirigida a Situtec porque “son ellos los que están en conflicto”.

¿Cómo se entra a la Utec?

Otro de los puntos de conflicto entre el sindicato y el consejo directivo central provisorio es la forma de ingreso a la Utec. En el concurso público se califica con 20 puntos máximos la formación académica, 20 para la experiencia profesional y 45 para la instancia de entrevista. Según el representante sindical, este mecanismo, en el que pesa tanto la entrevista, “deja la puerta abierta para meter a quien se quiera”. Por su parte, el consejero de la Utec dijo que no hubo protestas en casi ningún concurso y agregó: “La entrevista pesa lo que tiene que pesar; la meritocracia al kilo, la de cuantos más papeles llevo mejor soy, es muy difícil de evaluar. Todos los que fuimos docentes sabemos que esas cosas también tienen que ver con la capacidad que uno tenga de juntar papelitos, importa mucho, pero para los cargos docentes y técnicos y de apoyo, me parece que la forma de entrar está bien”.