El presidente Luis Lacalle Pou recibió este jueves al rector de la Universidad de la República (Udelar), Rodrigo Arim, quien le transmitió su preocupación por el “incremento presupuestal nulo” que el Poder Ejecutivo elevó al Parlamento en relación a la institución.
Según dijo Arim a la diaria, el presidente “fue muy receptivo a los planteos que se hicieron”: “Obviamente no correspondía que asumiera alguna responsabilidad con respecto a atender las circunstancias, pero tomó nota”. Por otra parte, el rector comentó que ha tenido “señales positivas desde legisladores de la coalición que buscan maneras de contemplar algunas preocupaciones de la Udelar”.
En la reunión con Lacalle, Arim planteó la situación sobre las becas que se otorgan a estudiantes y dijo también que si no se obtienen mayores fondos “algunas carreras en el interior del país” tendrán “problemas serios de sustentabilidad”.
Arim advirtió que no todas las carreras están en peligro porque la Udelar “se comprometió” con la descentralización, pero dijo que el proceso tiene “la fortaleza de una experiencia nueva, pero también la fragilidad que implica tener recursos todavía escasos para el número de estudiantes que recibimos en el interior y la investigación de calidad que se hace ahí”. Además, recordó que actualmente la Udelar tiene cerca de 20.000 estudiantes en seis centros universitarios.
Por otra parte, Arim resaltó que hay “riesgos relevantes también para los cargos docentes de dedicación total, que es el principal instrumento, no de la Udelar sino del país, para fomentar la dedicación y exclusividad a la investigación científica y cultural. Si no logramos tener recursos adicionales para el régimen de dedicación total de la Udelar es probable que perdamos a casi 500 jóvenes profesionales con nivel de doctorado que no van a tener chances objetivas de insertarse creativamente en el país”.
Arim subrayó que “no hay otros espacios institucionales donde se pueda desarrollar esta actividad [de investigación], por lo tanto es una pérdida importante en términos de lo que el país puede sacrificar ante una circunstancia que es compleja, como sin dudas estamos atravesando tanto del punto de vista social, económico y sanitario; pero tenemos que evitar como sociedad que medidas de muy corto plazo para contener problemas de esta naturaleza nos terminen perjudicando a mediano y largo plazo al perder algunas generaciones de jóvenes valiosos para la investigación científica, la creación cultural y la construcción de una sociedad más diversa y más rica en todos sus acervos”.