Ante una inminente reestructura, los profesores y la oposición salen a defender el programa Formación Profesional Básica (FPB), que tiene el centro en la inclusión educativa en la educación media. El plan depende de la Dirección General de Educación Técnico Profesional-UTU, que para proyectar los cambios realizó un estudio, que se sumó a otro que hizo en paralelo el Instituto Nacional de Evaluación Educativa (Ineed). Los resultados preliminares de estas evaluaciones ya están en manos del director general de la UTU, Juan Pereyra, pero por el momento no serán difundidos porque todavía no culminaron, según supo la diaria.

Desde el Ineed se intenta “mirar los aprendizajes, la continuidad educativa y las opiniones de actores”, comentó en diálogo con la diaria el director en representación del Frente Amplio (FA), Pablo Caggiani.

De todas formas, desde la Comisión de Defensa del FPB, integrada principalmente por docentes, tienen buenas expectativas sobre los resultados de esos estudios. En una carta enviada a Pereyra a la que tuvo acceso la diaria, este grupo consideró “fundamental” que el FPB continúe “sosteniendo” a los estudiantes. La carta introduce como un agravante la suspensión de la presencialidad en la educación en buena parte del último año y medio, “en plena pandemia y en la crisis económica en la cual estamos inmersos”. “Es una herramienta pedagógica que mantiene e incluye a los estudiantes en la educación, por tal, exhortamos que este plan siga siendo una opción para todos los estudiantes”, agregan sobre el plan.

Además, destacan que es el único curso de ciclo básico en el que las formaciones técnica y tecnológica tienen “prioridad”, algo que se refleja en el perfil de egreso, ya que, además del ciclo básico obtienen un certificado de operario práctico que incentiva su continuidad educativa y técnica. “Es el plan que mejor se adapta, en este momento, en la integración de personas con diferentes capacidades, apostando a un ejercicio pleno de sus derechos”, apunta la comisión.

Asimismo, le explicaron al director general de UTU que el programa cuenta con una coordinación semanal —los Espacios Docentes Integrados— entre todos los profesores de un mismo grupo y un educador asignado, en la que se analiza la situación singular de cada estudiante con el “fin de generar estrategias particulares”. En dicho encuentro semanal se planifica una tarea educativa que es integrada e interdisciplinaria y, por lo tanto, habilita a que el plan esté en permanente reformulación, de acuerdo a los procesos personales y grupales, ya que se adecua a cada contexto, indican en la carta.

Día a día

Mariela Bruzzese, integrante de la Comisión de Defensa del FPB, que comenzó a funcionar el año pasado ante la posibilidad de que el plan se eliminara, dijo a la diaria que para ese grupo este programa “es fundamental”. Según amplió, “intenta abarcar a un montón de chiquilines a quienes los otros planes no sostenían, por lo que, de alguna forma, fracasaban y no podían continuar estudiando”, añadió. Según apuntó, cada grupo tiene demandas y fortalezas diferentes y por eso a los estudiantes se los integra de forma que todos “puedan ser sostenidos por este plan”.

Por su parte, Milton Vera, docente de carpintería en UTU, aseguró que es un plan “totalmente adaptable” y que se puede desarrollar en los diferentes territorios. “Se ha hecho en localidades rurales, ha habido FPB específicamente para algunos casos de zonas muy alejadas, pero también puede funcionar en los centros de barrio, con la participación de otras instituciones; están los FPB comunitarios, es un plan adaptable a las demandas que pueda tener una comunidad y eso es importante”, afirmó.

Según la comisión, UTU decidió que el memo de la Plataforma Gurí establezca como condición para el ingreso al FPB a estudiantes extraedad, excepto en las zonas en donde no haya oferta de educación media básica. Según pudo saber la diaria, desde la Dirección General de Educación Técnico Profesional decidieron que, como primer cambio, se aumente la edad de los estudiantes para ingresar al plan de 12 a 14 años. “Esto quiere decir que aquellos alumnos que terminan primaria no van a tener la opción de elegir el FPB. Nosotros entendemos que aquí, las autoridades, como mínimo están en falta ante la reglamentación vigente, porque hay una resolución de 2017 por la que no existe un límite de edad para el ingreso al FPB”, apuntaron Bruzzese y Vera.

Resultados

Sobre la evaluación que están haciendo los organismos, los profesores dijeron que están “muy tranquilos”, porque “va a ser positiva”. “Es uno de los planes que ha evolucionado favorablemente y en todo sentido. Si hay una crítica de pronto es en el porcentaje de culminación de los gurises y nosotros estamos seguros de que en eso este plan va a tener resultados positivos”, estableció Vera. Además, los profesores entienden que este plan ha sido “100% exitoso” porque le dio “oportunidad y esperanza” a muchos jóvenes que, de otra forma, “no hubiesen logrado terminar un ciclo educativo; honestamente, no sabemos dónde estarían”.

Los docentes están convencidos de que se está haciendo una inversión para darle oportunidades a esos jóvenes: “¿Qué pasa luego si no le damos esas posibilidades a estos chicos? ¿Vamos a invertir en cárceles, por ejemplo, o en otro tipo de asistencia para estos chiquilines? La experiencia que han tenido los gurises te pone la piel de gallina. Quizá no tenemos el 70 o el 80% de aprobación de los que ingresan a los que terminan, pero andamos ahí. ¿Son recursos que no tienen un resultado positivo? Creo todo lo contrario”, dijo Vera.

Además, el docente señaló que quiere conocer la reformulación del programa que se prepara desde UTU. “Queremos conocerla, verla, debatirla, conversarla o que aparezca alguna alternativa para los chicos que supere el FPB, que sea más atractivo, en eso estamos de acuerdo, siempre y cuando sea en beneficio de los chiquilines”.

En defensa

Desde el FA defenderán el programa que nació en el primer gobierno de Tabaré Vázquez. Enzo Malán, diputado por el Partido Socialista, señaló a la diaria que ya “hay 200 grupos menos, recortes de horas y 2.000 gurises sin atención”. Malán consideró que el FPB "se está desmantelando” sin que haya “una alternativa” para “esos muchachos” que hoy “están fuera del sistema educativo”. Asimismo, el diputado dijo que ha realizado varios pedidos de informes para ver si “es posible que haya una alternativa”: “Si me dicen que esto no funcionó por tal y tal motivo, bien. Estamos esperando la respuesta y después ver qué acciones se pueden realizar. Desde la Comisión de Educación y Cultura [de la cámara baja] citar al director general estaría planteado para analizar esta situación, que es bastante preocupante”, dijo.