“¡Sin luchas no hay victorias!”, dice la placa publicada por el Centro de Estudiantes de Magisterio (CEM) que acompaña el aviso de que este martes los Institutos Normales de Montevideo están ocupados por los y las estudiantes.
En una extensa plataforma reivindicativa, el estudiantado que nuclea el CEM aseguró que volvieron a ocupar y parar como medida de lucha debido a “diversas problemáticas que afectan a la formación en Magisterio”, muchas de ellas, “problemáticas históricas”, como “la deficiente infraestructura edilicia” que, aseguran, les “impide estudiar en condiciones dignas”.
Otro de los problemas históricos es la “falta de garantías” para la realización de las prácticas, en cuanto a “cupos, docentes, y jardines o escuelas”, así como la superpoblación de los grupos. Asimismo plantean que hay un “reducido cupo de becas”, lo que, bajo la lectura del CEM, “convierte a la educación en un derecho accesible únicamente para quienes pueden permitírselo económicamente”.
Más allá de los problemas que datan de tiempo atrás, los y la estudiantes aseguraron que este año se sumaron “nuevos inconvenientes”. Uno de ellos corresponde a que el Consejo de Formación en Educación (CFE) “estableció el 1° de abril como fecha de inicio de las prácticas, sin implementar ningún tipo de medida que garantice que todas las estudiantes podamos comenzarlas en la fecha estipulada”.
Tras el reclamo del CEM a las autoridades del Consejo, narraron que el comienzo de las clases se pospuso para el lunes 7 de abril, para así “resolver y garantizar el comienzo de las prácticas para todas las compañeras, y no para algunas sí y otras no”.
También en vinculación a las prácticas, la dirección del instituto elaboró este año una nueva propuesta para cuarto de Maestro de Educación Primaria (MEP). De acuerdo al CEM, sin embargo, “esta propuesta está fundada en una resolución del CFE de 2024 que no fue cumplida y que contradice al Plan 2008”. Según explican, “establece que se cumpla con tres horas de 45 minutos de teórico de didáctica a contraturno de las prácticas, de manera periódica, pero sin una regularidad determinada ni, por supuesto, aviso a las estudiantes a la hora de la inscripción”.
Por otra parte, con relación a la carrera de Maestro en Primera Infancia (MPI), señalaron que el teórico didáctico de cuarto año se realizará en los jardines, y si bien parece un cambio “positivo”, “no lo es”. En primer lugar, afirman que viola una disposición que establece que las estudiantes deben cursar el teórico de didáctica “en el instituto correspondiente”. Por otra parte, señalan que “las compañeras que no pudieron elegir los centros más convenientes según sus realidades se ven obligadas a pasar más horas en los centros de práctica, lo que afectará su rutina diaria, o, como otra opción, perder tiempo de práctica”.
Sobre estos dos últimos puntos, el Centro de Estudiantes exige que “se garanticen las condiciones para que tanto tercer año de MPI como cuarto de MEP y MPI realicen sus prácticas en tiempo y forma, de acuerdo a los programas de los planes a los que cada curso pertenece”.
Más reivindicaciones
Otro de los temas que reclaman los y las estudiantes de Magisterio es que existen docentes dentro de los institutos que “tienen denuncias en su contra, e incluso que han atravesado procesos de sumario, pero siguen ejerciendo con libertad en los Institutos Normales”. “Esto no sólo atenta directamente contra nuestra formación profesional, sino que resulta sumamente violento para las compañeras cuyos cursos dependen de ellos y conviven con sus actitudes agresivas, impidiendo la libre expresión de las estudiantes; nos cuestionamos: ¿quién nos protege en Magisterio? ¿Qué valor tienen nuestras denuncias, que son reiteradamente ignoradas?”, esbozaron.
Al respecto, el CEM exige que los docentes sumariados sean separados de sus cargos en todas las instituciones del CFE y que no puedan ejercer allí. Agregaron, además, que dentro de Magisterio hay un “acosador” al cual desde el CEM han “denunciado en varias ocasiones a lo largo de 2024, pero las autoridades exigen que las compañeras denunciantes se expongan para elevar una denuncia formal”.
Dentro de la plataforma reivindicativa también está el reclamo de que la oferta de optativas para MPI del Plan 2017 “se vio reducida a los cursos de formación de Ceibal” y actualmente “no hay certezas” sobre cómo será su acreditación.
Otro de los puntos refiere a la creación e implementación reciente de la Tecnicatura Acompañante Pedagógico en Educación Inclusiva. De acuerdo al CEM, “aún no se tiene claridad sobre su propósito, los programas, el espacio de inserción, las reválidas, entre otros aspectos”, así como también denuncian “una gran falta de docentes para la misma, lo que genera aún más incertidumbre sobre su implementación y funcionamiento”.
Volviendo a reivindicaciones que no son nuevas y que siguen sin soluciones, los y las estudiantes reiteraron el reclamo por la creación de un equipo multidisciplinario “que atienda la salud mental de las estudiantes del instituto”. Por otra parte, también denuncian una “falta de boletos gratuitos para estudiantes de formación en educación, lo que afecta la permanencia y el acceso a las prácticas y cursos”.
“Exigimos que las autoridades estén a la altura de nuestros reclamos. El presupuesto destinado a nuestra educación son migajas en comparación a sus sueldos. Las estudiantes estamos organizadas y sabemos que la lucha es el camino”, finaliza el comunicado.