Casi 20 años después de que la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) creara los programas de Convivencia y de Educación Sexual, este miércoles, en el salón de actos del liceo IAVA, la Dirección de Derechos Humanos del organismo llevó a cabo un encuentro enmarcado en ese eje temporal: “Educación en Derechos Humanos y memoria en la ANEP. Desafíos y perspectivas a 20 años de los programas de Convivencia y Educación Sexual”.
En la instancia, Nilia Viscardi, directora de Derechos Humanos de la ANEP, que abarca ambas temáticas, recapituló los cometidos que tiene la dirección desde su origen, pero también los que tiene desde que asumió el nuevo equipo, que estará al frente de la gestión por el resto del quinquenio. Los diferentes lineamientos, que abarcan distintas áreas, también fueron presentados en el encuentro por representantes de cada sección.
“La diversidad es la esencia de lo que nos hace humanos, y es ahí desde donde nos tenemos que parar. Veinte años de estos programas… Pero no es tanto: para construir algo se necesita tiempo, para pensar en algo con proyección se necesita tiempo”, aseveró, por otra parte, Elbia Pereira, consejera política del Consejo Directivo Central (Codicen), una de las autoridades presentes.
De acuerdo con Pereira, durante estos 20 años hubo “grandes” y diversos actores que “aportaron” a la construcción de los programas, pero también “retrocesos” cuya reconstrucción “va a llevar bastante más tiempo, porque no sólo se escriben en documentos”. No obstante, enfatizó que “lo más importante son las acciones”. “La convivencia es un tema que hay que tomar con responsabilidad”, así como la “educación sexual integral [ESI]”, dijo, y agregó: “Es una responsabilidad, un compromiso que no puede quedar sólo en un papel”.
Según la consejera política, el “propósito” actual del Codicen y de la Dirección de Derechos Humanos es “tomar” lo avanzado y “hacerlo en el hoy a la manera de hoy, con las voces de todos y todas, sobre todo con quienes están en territorio, que son los estudiantes”.
Las proyecciones para el quinquenio
“Pretendemos la paz, pero trabajamos en conflicto porque sabemos que la sociedad está lejos de la igualdad, de la justicia, y esto queremos resolverlo pero está presente siempre”, manifestó Viscardi respecto del contexto en el que se desempeña la dirección.
La jerarca subrayó la importancia del diálogo, centrado en un “debate pedagógico, social y académico”. De hecho, señaló que son 30 las comisiones que integran la Dirección de Derechos Humanos. Tienen claro alguno de los objetivos a llevar adelante, por ejemplo, “la crítica y revisión permanente de la práctica”. Para eso, comunicó, analizarán la normativa y la reglamentación existente.
Otras “perspectivas y supuestos” son “el seguimiento y monitoreo de los derechos, la humanización del trabajo en el conflicto, la disminución de la violencia institucional, el reconocimiento de la pluralidad de los conflictos y violencias, el seguimiento y monitoreo de los derechos, el desarrollo de proyectos socioeducativos localmente situados, la creación de políticas participativas en educación y el fortalecimiento de la participación de niños, niñas y adolescentes”, enumeró Viscardi.
Subrayó la intención de “impulsar” más proyectos socioeducativos, así como de profundizar en las políticas de memoria, en vinculación con el pasado reciente, de manera “localizada y territorializada de las minorías y de la diversidad”.
Viscardi especificó que desde agosto hasta octubre la dirección tendrá instancias de “articulación” con los distintos subsistemas: la Dirección General de Educación Inicial y Primaria (DGEIP), la Dirección General de Educación Secundaria (DGES), la Dirección General de Educación Técnico Profesional (DGETP) y el Consejo de Formación en Educación (CFE).
Por otra parte, señaló que pretenden “actualizar la plataforma digital interactiva, el repositorio de recursos informativos elaborados por la Dirección de Derechos Humanos”. La intención es “avanzar en un observatorio de pluralidad de derechos, de seguimiento de situaciones de vulneración de derechos y establecer, por otro lado, reuniones de trabajo con los puntos focales de cada subsistema para coordinar estas iniciativas”.
La formación docente es uno de los ejes de desvelo de la dirección. De acuerdo con Viscardi, es de relevancia fortalecerla mediante la línea de trabajo de convivencia y participación. En ese sentido, anunció que pretenden consolidar un “sistema integrado de formación en estas áreas” para los estudiantes del CFE, los “docentes noveles” y los que están en ejercicio. Asimismo, junto con Ceibal y el Proyecto de Apoyo a la Escuela Pública Uruguaya, tienen la iniciativa de “pensar un diploma de posgrado en coordinación con la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación [de la Universidad de la República] y continuar con la investigación sobre convivencia y participación en clave de derechos humanos”.
Las políticas para lograr una ESI
Patricia Píriz, coordinadora del Área de Educación Sexual Integral, resaltó en el encuentro que desde la ANEP, con el nuevo equipo de gestión de la administración, vuelven a “hacer énfasis en que la ESI es un derecho de niños, niñas y jóvenes”. “Es una línea transversal en la educación, está consagrada en la ley y así la asumimos en este próximo quinquenio y queremos que sea de manera sostenible en el tiempo”, aseguró.
Aun así, señaló que en el sistema educativo tiene “una historia de al menos 20 años” y que ha sido sostenida por las personas que trabajan en el territorio. Sin embargo, en este quinquenio quiere un fortalecimiento de la palabra integral que complementa a la educación sexual. Píriz señaló que para eso es “fundamental que tenga enfoque de género, de sexualidades, derechos reproductivos, masculinidades y curso de vida”.
En este marco, la coordinadora habló de ciertas “acciones pensadas” con el fin de “reactivar la ESI”, como la reinstalación de la Comisión de Educación Sexual, que se presentará oficialmente el 7 de agosto junto con las estrategias que llevarán a cabo para apuntar a “mejorar el alcance, la calidad y la cobertura de la ESI a nivel nacional”. Anunció, además, que esta vez tendrá un nuevo actor que la conforme junto con los subsistemas: la Dirección de Educación de Jóvenes y Adultos.
Otra acción que Píriz consideró “fundamental” es “articular con las otras áreas y con distintos actores”, entre ellos los estudiantes. Además, crearán un grupo ad hoc junto con la academia, organizaciones civiles y la cooperación internacional, a los efectos de auspiciar el acompañamiento en el “diseño de la estrategia”.
Píriz agregó que trabajarán junto con el Ministerio de Salud Pública en torno a la agenda de derechos sexuales y reproductivos que impulsa la cartera. Por último, al igual que Viscardi, hizo énfasis en la búsqueda de fortalecer la formación permanente y de posgrado de docentes y estudiantes de docencia, con el área de educación sexual.
Diversidad, género y memoria
Uno de los anuncios de la jornada vinculado a la temática lo hizo Lorena Placencia, integrante del Área Socio-Jurídica de la dirección: se aprobó un nuevo protocolo para prevenir el acoso sexual en la ANEP y para proteger a los y las estudiantes de los centros educativos. “No es una actualización, sino un documento nuevo que plantea un nuevo paradigma: queremos que toda la comunidad educativa conozca este documento”, dijo.
Asimismo, aseveró que junto con el Área de Convivencia y Participación trabajarán “fuertemente” para “abordar en clave de derechos las situaciones de violencia hacia niños, niñas y adolescentes”. Especificó que desde hace “poco tiempo” en la ANEP existen mapas de ruta ante situaciones de violencia, “pero hay territorios en nuestro país donde no está incorporado este mecanismo de trabajo de prevención, lo que significa que hay un desafío de darle masividad al conocimiento de este documento en todos los centros del país”.
Otro de los grandes anuncios presentados por Placencia es que cuentan con el “apoyo de las autoridades para crear la Unidad Especializada en Género y Diversidad” de la ANEP. Desde allí, afirmó, piensan “avanzar y dar un gran salto para que se formalice y trabaje mucho en que todos los niveles de la enseñanza comprendan una perspectiva de género y diversidad”.
Placencia señaló al respecto que “hay necesidad de que el sistema y los centros educativos tengan pautas claras, normas de la ANEP que realmente brinden herramientas a los centros educativos para acompañar la diversidad sexual y velar por la protección de las trayectorias educativas”. En ese sentido, la formación es uno de los aspectos a profundizar, además de “avanzar hacia el trabajo de prevenir y hacer un adecuado abordaje de la violencia basada en género”.
Por último, Placencia afirmó que la dirección quiere también “progresar y generar objetivos y acciones claras para la promoción de la igualdad de oportunidades y la diversidad sexual, también en el funcionariado de la ANEP”.
La afrodescendencia y la equidad racial también tienen lugar en la Dirección de Derechos Humanos, que pretende sensibilizar en clave de interculturalidad y diversidad. Por otra parte, el área de territorio y sistemas de información buscará reconocer las necesidades locales, articulando con los distintos equipos territoriales. Asimismo, sobre la memoria del pasado reciente, la Dirección de Derechos Humanos representará a la ANEP en la Comisión Nacional Honoraria de Sitios de Memoria y convocará a los y las docentes para profundizar en las líneas a seguir sobre el tema.