La ley de financiamiento de partidos políticos continúa en el orden del día de la Cámara de Representantes. La iniciativa, que cuenta con media sanción del Senado, descansa en el Parlamento desde diciembre del año pasado, cuando el diputado de la Liga Federal (LF) Darío Pérez se retiró de sala cuando se iba a votar. Desde entonces, la bancada de diputados del Frente Amplio (FA) marcó como prioridad la aprobación de la ley, particularmente teniendo en cuenta el año electoral.
La coordinadora de bancada, Susana Pereyra (Movimiento de Participación Popular, MPP), dijo a la diaria la semana pasada que el objetivo de los legisladores frenteamplistas es que la ley se pueda aplicar en las elecciones nacionales y las departamentales. Sin embargo, mientras que la mayoría de los sectores del FA está de acuerdo en impulsar la propuesta cuanto antes, la LF continúa planteando discrepancias y propuso trabajar la propuesta luego de las elecciones internas. El dirigente de la LF José Maldonado, en la misma ocasión, había señalado: “Falta tan poquito para la elección” que “cambiar las reglas de juego [antes de las internas] no parece conveniente”.
Ante la falta de acuerdo con la LF, la semana pasada en la última reunión de bancada, el diputado Alejandro Zavala (Ir) planteó buscar el voto para la aprobación final por fuera de la coalición de izquierda y propuso negociar con el diputado Fernando Amado, de la Unión Izquierda Republicana (Unir). “Como en la última bancada tampoco teníamos el voto de la LF, propuse hablar con Amado, con quien teníamos pendiente la discusión del proyecto de los debates obligatorios”, señaló Zavala a la diaria. “La discusión sobre los debates tiene que ver con la misma preocupación sobre la transparencia de la política”, comentó.
El diputado de Ir explicó que propuso incluir el proyecto de Amado dentro de la ley de financiamiento para que tuviera “una sola aprobación” y remitirlo al Senado para la aprobación definitiva. Asimismo, contó que transmitió la propuesta al líder de Unir a título personal, no en nombre de la bancada. No obstante, señaló que entre los legisladores frenteamplistas “nadie estuvo en contra”, aunque “tampoco hubo una decisión de hacerlo de esa manera”.
Por su parte, Amado dijo a la diaria que sí habló con Zavala, pero desde la bancada del FA nadie se comunicó formalmente. “No hay nada arriba de la mesa”, señaló el diputado, y aclaró que no mantuvo conversaciones sobre el tema con legisladores del FA. “He estado hablando con el FA y con [la diputada del MPP] Bettiana Díaz tuvimos una reunión, pero por el proyecto de debates obligatorios”, aseveró.
El diputado de Unir enfatizó que “lo del financiamiento es otra discusión” y manifestó que no votará la iniciativa con la redacción actual. De todas formas, señaló que su sector “está dispuesto siempre a sentarse a hablar sobre un proyecto” y destacó la importancia de regular el financiamiento de los partidos, que “beneficiaría” a las agrupaciones políticas más pequeñas “de la asimetría obscena que existe en la política”.
“Para poder hablar de otros proyectos, primero que [el FA] vote el de debates y cumplan con la palabra. Si no, ¿cómo uno puede confiar en el otro?”, expresó Amado, y señaló que al manifestar su apoyo públicamente, los legisladores del FA se “comprometieron” con él y con la ciudadanía. “Yo sigo esperando y los tiempos se achican”, agregó.
La diputada Díaz comentó a la diaria que durante el encuentro con Amado hablaron “específicamente” del proyecto de debates obligatorios y “nada más”, pero que son “discusiones que van de la mano”. Díaz explicó que la propuesta de Amado incluye la “retención de financiamiento público” en caso de violar la obligatoriedad de debatir y si se retira, “justamente lo que hay que regular es el financiamiento privado”. De todas formas, la diputada subrayó que la aprobación de un proyecto no está “supeditada” a la votación del otro.