(Hoy es 7 de agosto. Faltan 81 días para las elecciones nacionales)

Buenos días. Les comento algunas noticias de la campaña electoral que pueden leer hoy en la diaria.

El Partido Nacional (PN) concluyó sus trabajos para elaborar un programa común, que se basa en el del sector Todos de Luis Lacalle Pou, ganador de las internas, con aportes de otras corrientes internas. Hay varios aspectos que seguramente serán motivo de debates en los próximos meses, entre ellos la idea de eliminar la representación docente en los consejos de la Administración Nacional de Enseñanza Pública. A primera vista, no quedó mucho rastro de las propuestas manejadas durante la campaña de Todo por el Pueblo, el sector liderado por Juan Sartori, que ocupó el segundo lugar. Tampoco hay un aval al proyecto de reforma constitucional impulsado por Jorge Larrañaga, que quedó tercero, aunque se propone declarar una “emergencia nacional en seguridad pública” y aumentar las penas para algunos delitos.

Ya que hablamos de la cuestión de la seguridad, el candidato del Partido Independiente, Pablo Mieres, le respondió al del Frente Amplio, Daniel Martínez, que considera “imposible avanzar en acuerdos” sobre ese tema o sobre políticas laborales, explorando la posibilidad de políticas de Estado, antes de las elecciones de octubre. Mieres sí está dispuesto a buscar acuerdos interpartidarios sobre educación, y propuso hacerlo en un espacio de diálogo “articulado por Eduy21”. Martínez ya replicó que está abierto a “recoger sugerencias” de ese grupo, pero no sólo de él.

Otra imposibilidad de avanzar en acuerdos se está consolidando entre el Partido Colorado y Cabildo Abierto (CA). Julio María Sanguinetti afirmó que el voto a CA es “inútil”, un “voto perdido”, y que el líder y candidato presidencial de ese partido, Guido Manini Ríos, renuncia de antemano al diálogo. Manini Ríos retrucó que votarlo “no es útil para seguir con más de lo mismo, no es útil para seguir con los privilegios de algunos, con la corrupción en el poder”, y que por eso “ya empezó la estrategia de los que se resisten a los cambios en serio”.

Por otra parte, ayer el PN presentó en el Senado su anunciada propuesta de “condena a la dictadura de Nicolás Maduro” en Venezuela. Pocas dudas caben de la importancia de la cuestión venezolana, y menos aún de que el debate -tercero sobre el tema en seis meses- se promovió, en gran medida, para complicarle la vida al oficialismo. El despliegue retórico terminó sin que se aprobara ninguna moción, debido a que la introducción del asunto en el orden del día se realizó planteándolo como “cuestión política”, y de acuerdo con el artículo 69 del reglamento del Senado, eso exige una mayoría de dos tercios de los presentes para “tomar decisión sobre el fondo del asunto”. Durante la sesión, el colorado Pedro Bordaberry cometió un reiterado lapsus, muy comentado en redes sociales, al decir: “Nunca he defendido una democracia... nunca he defendido una dictadura en mi vida. Siempre he condenado una democracia... una dictadura”. Sigmund Freud explicó muy bien el asunto hace ya 118 años, en Psicopatología de la vida cotidiana, y especialmente en su capítulo V.

Hasta mañana.