De cada diez allanamientos que se solicitaron entre 2020 y setiembre de 2024, casi tres fueron por delitos relacionados con estupefacientes, según datos aportados por la Fiscalía General de la Nación a la diaria tras un pedido de acceso a la información pública.
En promedio, la Fiscalía solicita 2.100 allanamientos por año, lo que da algo más de cinco allanamientos por día, también en promedio. En 2020 se pidieron 2.282 allanamientos en total, de los cuales 635 (27,8%) fueron por delitos vinculados a estupefacientes; en 2021 la cantidad de allanamientos por estos delitos fue de 634 sobre 2.191 (28,9%); en 2022 fueron 721 en 2.392 (29,8%); en 2023 se realizaron 738 allanamientos por estupefacientes sobre 2.299 (32,2%), y en 2024, hasta el 13 de setiembre, se realizaron 444 allanamientos por delitos vinculados a estupefacientes de 1.703 (26,1%).
Luego de los vinculados a drogas, los delitos por los que la Fiscalía solicita en mayor medida este tipo de procedimientos son los hurtos (17,5% en promedio), las rapiñas (13,1% en promedio) y los homicidios (9,5% en promedio).
El abogado Juan Ceretta sostiene que las cifras de allanamientos solicitados por delitos de estupefacientes “no son asombrosas” y “no se condicen” con el discurso de los promotores del plebiscito para habilitar los allanamientos nocturnos en viviendas. Los impulsores de la iniciativa hacen especial hincapié en que se trata de una herramienta útil para contrarrestar el microtráfico de drogas.
Martín Fernández, abogado del Instituto de Estudios Legales del Uruguay, coincidió con Ceretta en ese diagnóstico. “Parecería que los allanamientos por drogas no están siendo utilizados. En el discurso se dice que los allanamientos por drogas son la base, pero no tienen un peso tan grande”, evaluó en diálogo con la diaria.
Ceretta también llamó la atención sobre la cifra de allanamientos requeridos por delitos vinculados a la violencia doméstica. Este tipo de operativo está habilitado para realizarse en la noche desde que comenzó a aplicarse la Ley de Violencia Basada en Género. En promedio, en el período 2020-2024, sólo 1,5% de los allanamientos solicitados por la Fiscalía estuvieron vinculados a delitos de violencia doméstica, señala el informe.
Fernández apuntó que lo que prevé la ley es que ante una denuncia por violencia doméstica se habilita el allanamiento en horas de la noche porque la “denuncia se toma como consentimiento de la víctima” para poder ingresar a allanar. De todos modos, Fernández dijo que “las situaciones de riesgo pueden no darse”, lo que no activa la posibilidad del allanamiento.
Ambos abogados señalaron con preocupación el bajo porcentaje de allanamientos solicitados para combatir el delito de lavado de activos. En promedio, entre 2020 y lo que va de 2024, sólo 0,3% estuvo relacionado con los delitos de lavado de activos y corrupción. Los dos profesionales señalaron que se trata de un tipo de delito importante para la persecución del narcotráfico y que la baja cifra demuestra que no es de interés para la política criminal actual.
“Esto demuestra que no está dentro de la política pública perseguir este delito”, apuntó Ceretta. “Si hay algo que los allanamientos pueden recabar, que es clave para una investigación del narcotráfico, son pruebas como discos duros y otro montón de elementos”, valoró, y recordó que los allanamientos son, principalmente, una herramienta para reunir pruebas.