El candidato del Partido Nacional (PN), Álvaro Delgado, presentó esta tarde las propuestas de su plan de gobierno dirigidas a la juventud. Lo hizo acompañado de la candidata a la vicepresidencia, Valeria Ripoll, la alcaldesa del Municipio Ch, Matilde Antía, el presidente y el director de la juventud del PN, Tomás Casaretto, el director del Instituto Nacional de la Juventud (INJU), Lucas González, el asesor de campaña, Aparicio Saravia, y el expresidente del Banco Central Lucas González. Las medidas hacen énfasis en tres áreas: empleo, vivienda y salud mental y adicciones.
Delgado afirmó que este gobierno “tuvo logros concretos” en materia de políticas para jóvenes y mencionó la ley de empleo juvenil, el programa Ni silencio ni tabú del INJU, un “aumento histórico para las becas de estudiantes”, la ciudad universitaria “Jorge Larrañaga” y “un aumento en el egreso de la educación media” a raíz de la transformación educativa.
Tomas Casaretto.
Foto: Ernesto Ryan
Empleo
La creación de 30.000 puestos de trabajo para jóvenes será el foco del PN si asume el gobierno. El director de la juventud nacionalista mencionó dos medidas que van detrás de este objetivo. En primer lugar, “un programa con una exoneración tributaria” para los aportes patronales y personales de empleos por debajo de los 30.000 pesos. Esta estrategia “muy probablemente” generará más de 15.000 empleos y se buscará que estén “principalmente orientados a la juventud”, dijo González. Como segundo punto, mencionó el seguir escalando y “ahondando” el programa Yo Estudio y Trabajo.
Además, sobre la ley de empleo juvenil, Casaretto aseguró que “tiene la necesidad de seguirse reinventando para tener una aplicación mucho más real”. En ese sentido, planteó un proceso de desburocratización en “los procesos de contratación, la agilización, el abaratamiento para que la ley realmente pueda llevarse a los hechos y se pueda llevar a la creación de puestos de trabajo reales”. Al respecto, Delgado remarcó que “hay que agiornarla, hay que quitarle trámites, hay que quitarle registros”.
Lucas González y Aparicio Saravia.
Foto: Ernesto Ryan
Vivienda
Antía fue la encargada de desarrollar las propuestas del eje de vivienda. Introdujo las dificultades que viven los jóvenes para acceder a una vivienda propia, alquilada o comprada. “Nosotros queremos que todos los jóvenes se desarrollen, queremos que vivan en sus propios hogares y se independicen”, dijo la alcaldesa.
En cuanto a la compra de viviendas, mencionó dos medidas para “todos esos jóvenes que estén trabajando y que no les dé para dar ese primer paso”: las viviendas promovidas con subsidios parciales de las cuotas y un subsidio en el aporte inicial de la compra. “Para muchos jóvenes, comprar una vivienda no es una opción inmediata, entonces vamos al alquiler”, dijo.
Además, la alcaldesa señaló que la campaña oficialista propone fortalecer el programa de becas con la Udelar y ampliarlo a la UTEC, construir más residencias universitarias y “alcanzar los 400 cupos” y establecer un programa de subsidio parcial -un tercio del alquiler- para la primera vivienda por un período de 24 meses y extensible otros 12.
Salud mental
El director del INJU realizó un repaso de lo que ha sido el programa Ni silencio ni tabú: “Ha alcanzado a más de 53.000 jóvenes en todo el país, ha formado a más de 2.000 educadores, docentes y adultos referentes en cómo tratar la temática de la salud mental y el bienestar en adolescentes y jóvenes”. Agregó que a raíz de “la última inversión, que ha sido histórica”, se instalarán “siete centros de atención y de promoción de la salud mental y el bienestar de adolescentes y jóvenes”, con 12 horas de atención y equipos multidisciplinarios.
Saravia explicó que los centros tienen la capacidad de atender a 5.100 jóvenes por año. La propuesta es generar al menos un centro Ni silencio ni tabú en cada departamento. “Los cálculos son que en el plazo de un año con todos estos dispositivos funcionando podremos alcanzar, impactar, sobre más de 95.000 jóvenes en todo el territorio nacional”, dijo y destacó que podrá aplicarse “una política que antes en el Uruguay no existía”.