A diferencia del Partido Nacional y el Frente Amplio (FA), el Partido Colorado (PC) encuentra complicaciones para definir antes del domingo, día en el que se llevarán a cabo las elecciones internas, cómo se conformará la fórmula de cara a los comicios de octubre, según lo que dejan entrever sus propios precandidatos.
Por ejemplo, Andrés Ojeda, quien lidera la interna colorada en la mayoría de las encuestas, dijo que “no hay ambiente” para que el domingo el PC pueda cerrar la fórmula. El precandidato planteó en rueda de prensa que “la fecha en la que se decida cómo completar la fórmula electoral no hace a la unidad partidaria” y que “no necesariamente” quien salga segundo o segunda en la interna debe ser el integrante de la dupla de cara a octubre.
“No hay ambiente para conversar eso. Están los compañeros y el ambiente un poco crispado, todos peleando con las encuestas y algo agresivos con nosotros. No es una queja, aprovecho más para saludar y aplaudir el esfuerzo de todos los compañeros en todo el país para ganarle al FA”, continuó Ojeda.
En cambio, Gurméndez expresó que la fórmula presidencial se debería determinar en función de los votos obtenidos y “en la forma más inmediata posible”. “Yo estoy trabajando para ser el primero, y en función de cómo se den los votos y la baraja, se determinará”, sostuvo el precandidato este lunes en rueda de prensa. “Naturalmente que aspiro a que el tema se resuelva lo antes posible”, estableció, y agregó que en el pasado, “por la demora” en resolver esa fórmula, el PC “ha tenido contratiempos”. En caso de que resulte ganador, Gurméndez va a “movilizar y encontrar los consensos en forma inmediata”, aseguró.
En tanto, desde el entorno del precandidato Robert Silva coinciden en que lo mejor sería que el 30 se anuncie la fórmula. Felipe Schipani, coordinador de la campaña del colorado, recordó a la diaria que en la última elección que ganó el PC, en 1999, la misma noche de la interna se cerró la fórmula entre Jorge Batlle y Luis Hierro López, que luego triunfaron en las nacionales. “Después, por distintas razones, no fue posible nunca hacerlo la noche de la elección interna. Por tanto, esa es una primera aspiración: tratar de que el 30 el partido conforme la fórmula y salga unido a encarar la elección de octubre. De lo contrario, le estaríamos dando cierta ventaja a los otros partidos”, evaluó Schipani.
Con respecto a los criterios de la fórmula, el diputado planteó que en esta interna, en la que entiende que entre el primero y el segundo no va a haber grandes diferencias, debe haber un criterio “objetivo”, que es el del voto. “Lo más razonable es que el primero sea el candidato a presidente y el segundo sea el vice”, sostuvo Schipani.
En esa línea, Schipani indicó que trabajarán en estos días para “propiciar un ambiente” para llegar a un acuerdo: “Cuanto antes se defina, mejor, para dar certezas y para dar una señal de unidad potente. Tenemos que hacer un enorme esfuerzo por tener la fórmula esa noche y vamos a trabajar para ello”, aseguró.
Días atrás, otro precandidato colorado, Tabaré Viera, dijo que es “un tema que no está decidido”, pero remarcó que para él es “deseable que esa noche quede resuelta y proclamada” la fórmula. “Habiendo acordado ya el PC que el que gana, gana, lo más lógico es que esa misma noche terminemos con una fórmula anunciada”, planteó.
Por su parte, el prosecretario del PC, Gustavo Osta, opinó en diálogo con la diaria que “cuanto antes” se resuelva la fórmula, “mejor”, e incluso no descartó que pueda ser la misma noche de las internas. “Sería lo deseable”, sostuvo, y agregó que esperan “no dilatar la decisión demasiado” en caso de que esa noche no haya un acuerdo entre los sectores colorados. A eso sumó los números que se den la noche propia del domingo, que, entiende, son “determinantes”.
No obstante, Osta consideró que si no se puede dar de esa forma, no sería “una tragedia”. “No va a ser ni la primera ni la última vez que a medida que aparecen resultados y se van consolidando las tendencias se puede encaminar una u otra solución”, sostuvo, y añadió que se está en un proceso de conversación “permanente”.