El director ejecutivo de la Agencia de Gobierno Electrónico y Sociedad de la Información y del Conocimiento (Agesic), Daniel Mordecki, aseguró este miércoles que Uruguay se encuentra en “un punto de inflexión” en su estrategia de transformación digital, tras dos décadas de políticas sostenidas que acompañaron la irrupción del smartphone, la revolución móvil y ahora el avance acelerado de la inteligencia artificial (IA).

Durante el evento anual de Agesic bajo la consigna “El mundo es digital”, que se realizó el miércoles, Mordecki sostuvo que el organismo trabaja en un proyecto para eliminar los certificados en los trámites públicos y en una hoja de ruta que definirá entre 45 y 50 proyectos de IA para el Estado hacia 2030.

“Estamos desarrollando el primer proyecto, que va a arrancar en 2026, para eliminar los certificados, los cuales son un tipo de documento que el Estado da para que se presente en otro organismo que determina que se cumplió con un atributo o sucedió determinado evento. Hace 40 años, se daba un papel y la persona lo llevaba. Hoy brinda un QR, un correo [...] Es más fácil, pero igual el ciudadano tiene que hacer la gestión en los dos organismos; estamos armando un proyecto para eliminar los certificados”, afirmó.

Dicha estrategia surge a partir de uno de los pilares de la estrategia de Agesic para los próximos años llamado “Estado sinérgico”, que busca que los organismos interactúen de forma articulada.

“El mundo es digital”

Mordecki recordó que la estrategia de digitalización del Estado comenzó hace 20 años, cuando todavía no existían los teléfonos inteligentes. “El iPhone es de 2007; la revolución móvil es de 2011. [...] Unos años después, llegó la IA. Se construyó una estrategia que soportó todos los embates”, dijo.

Actualmente, “lo sustantivo de la vida de las personas, la sociedad y las empresas es digital”. Desde comprar una entrada de cine hasta ver los análisis clínicos “en el momento en que están prontos”, casi todas las actividades cotidianas están mediadas por datos y transacciones digitales, añadió.

Ese escenario, afirmó, obliga a preguntarse si Uruguay está a la altura del desafío inicial: “Llegamos a un momento en el que el grueso de nuestra vida está soportado por información y transacciones digitales, y nos pone en el desafío de ver si estamos a la altura de los fundadores, para construir una estrategia que ponga a Uruguay en el siguiente nivel”.

“¿Cómo va a ser el Uruguay dentro de 20 años? Nadie sabe. Se trata de encontrar las líneas de trabajo que van a durar 20 años y empezar a trabajar en ellas. A esas líneas le llamamos los pilares de nuestra estrategia”, remarcó.

Ciudadanía digital

Uno de los pilares del nuevo ciclo es la ciudadanía digital “sin exclusiones ni excusas”, dijo Mordecki. Aunque Uruguay destaca en acceso y dispositivos, el director ejecutivo de Agesic advirtió que no todas las personas son capaces de realizar trámites o compras en línea.

“La cantidad de personas que transaccionan con privados o con el Estado, en realidad, está en el entorno del 65 o 70%. Hay un 30% que no hace transacciones. Si el mundo es digital, nosotros los estamos condenando a ciudadanos de categoría B. Eso no es ciudadanía plena”, afirmó.

Consideró que desde el Estado se debe generar una política que garantice a los ciudadanos un uso “seguro, consciente y libre” de las herramientas digitales.

Según la nueva Encuesta de Usos de Tecnologías de la Información y la Comunicación (UTIC), realizada por la Agesic, Presidencia y el Instituto Nacional de Estadística, Uruguay mantiene niveles muy altos de acceso a internet y dispositivos digitales. Sin embargo, también reveló desigualdades en el acceso a computadoras y en las habilidades necesarias para aprovechar plenamente las tecnologías emergentes.

El informe, que fue publicado el martes, advirtió que el perfil de las personas que no utilizan internet mantiene “características socioculturales diferenciadas”. El 94% de quienes no se conectan tiene más de 50 años, el 74% reside en el interior del país y el 80% pertenece a hogares de nivel educativo bajo. Este patrón, señaló el reporte, refleja “la persistencia de brechas estructurales en el acceso a internet”, pese a la expansión de la conectividad en la última década.

IA y datos

Mordecki sostuvo que el mayor cambio tecnológico de la época es que el valor de las aplicaciones pasó de los sistemas a los datos. “Esto va a cambiar la sociedad.¿Cuánto? No lo sabemos. Es un fenómeno irreversible”, afirmó.

Criticó que la discusión pública sobre IA esté dominada “por el marketing” y reclamó políticas de largo plazo: “Hay que aprovechar los beneficios y trabajar en los riesgos”.

“Agesic cuenta con una estrategia nacional de datos y de inteligencia artificial que fija principios, pilares y la institucionalidad para la gobernanza”, sostuvo, y añadió: “Estamos generando la hoja de ruta hacia 2030 que definirá entre 45 y 50 proyectos de IA para ejecutar en el Estado a partir de ahora. No son ideas, son proyectos que tienen presupuesto o van a tenerlo a partir de la discusión parlamentaria”. Para Mordecki, la discusión regulatoria es urgente pero compleja: “El 80% de la gente dice que hay que regular la inteligencia artificial. Estamos apurados, pero esta es la tumba de los cracks”. Subrayó que es necesario construir una ley de “consenso, duradera y equilibrada”.

“No tenemos una fecha. Queremos una regulación que genere beneficios para toda la ciudadanía y proteja derechos”, dijo, al tiempo que destacó que Agesic ya mantiene conversaciones con expertos jurídicos, plataformas, empresas, sociedad civil, organismos públicos y parlamentarios.

Gobiernos locales y ciberseguridad

Otro eje de la estrategia de Agesic es fortalecer la base tecnológica de municipios e intendencias. “No podemos tener municipios con una página de Facebook y un correo de Gmail”, advirtió Mordecki. Agesic trabaja con intendentes y ciudadanía para crear una plataforma común que permita brindar servicios digitales mínimos en todo el territorio.

“La idea no es un proyecto, es una estrategia. Queremos construir una forma en que las intendencias y gobiernos locales tengan un mecanismo para utilizar tecnología”, dijo.

Por otro lado, el director de Agesic subrayó que el delito se digitalizó y señaló que el narcotráfico y lavado de activos recurren cada vez más a los ciberdelincuentes. Delitos como estafas, fraude, extorsión, robo de identidad, acoso o violencia sexual “se instalaron y son un problema” para la vida cotidiana de las personas. “Necesitamos una política de largo plazo para resolverlo”, concluyó.