Los franjeados se fueron masticando la bronca por un partido que tenían absolutamente dominado y se le fue de las manos. Fueron amplios dominadores en el primer tiempo, su jugador maravilla, Carlos Grossmüller (premiado por la AUF como el mejor de julio), los puso en ventaja y tenían todo a favor. En el complemento cedieron espacio, Racing movió piezas, fue más punzante, y se encontró con un penal que Líber Quiñones, en el rebote, cambió por gol. Los dos siguen sin perder en el torneo, aunque los cerveceros aún no encuentran la victoria y están seriamente comprometidos con el descenso.

En el primer tiempo Danubio cargó varias veces sobre el área cervecera y tuvo su premio cerca del final. El zaguero Ibáñez, de Racing, quiso despejar y se llevó por delante a un hombre danubiano. Penal que Carlitos Grosmüller cambió por gol. La tónica no varió mucho en el inicio del complemento. Si bien Racing tuvo más la pelota y comenzó a llegar, no estuvo tan fino y eso le dejó espacios en el fondo. Los franjeados se conformaron con el resultado, cedieron espacio y aguantaron bien, pero no pudieron concretar la victoria.

El movimiento en los locales vino desde el banco para cerrar la mitad del campo y cortar varios circuitos cerveceros que intentaban llegar al empate. Eso salió bien, y dejó muy incómodo a los de Sayago para definir. Hubo alguna chance de Quiñones y Sebastián Fernández, que levantó en el complemento, pero en todas llegaban exigidos.

Sobre el final, ya de manera desesperada, una bola dio en la mano de un futbolista de Danubio y el árbitro Gustavo Tejera pitó penal. Cuándo no, Líber Quiñones se hizo cargo de la pena máxima y ejecutó. Su remate fue fuerte, contra el palo, pero Facundo Silva se lució. La suerte fue para el gordo, porque el rebote le cayó encima y puso el 1-1 definitivo.

También se repartieron puntos en el campus

En el estadio Domingo Burgueño Miguel de Maldonado Atenas recibió a River Plate y empataron 1-1. Mauro da Luz abrió el marcador para los darseneros a los 23 minutos de juego pero ya en la segunda etapa, a los 76, Federico Ramos lo empató con un golazo de tiro libre: el nacido en Piriápolis tomó la pelota y con un zurdazo la clavó en el ángulo superior derecho de Nicola Pérez. Atenas volvió a sumar un punto pero sigue muy complicado con el descenso.