Las bocinas suenan, se enronquecen. Los torsos se ven emerger por las ventanillas mientras se revolean camisetas. A la salida del estadio, en la ruta, en la ciudad, en casa, frente al televisor, una alegría inconmensurable, pura, histórica.

Como la primera vez, aquel 14 de diciembre de 1924, San José se coronó campeón del Sur. Más allá de la épica de la conquista en campo ajeno (aquella primera vez fue en Florida; el domingo, en Canelones) y del increíble desarrollo del partido –con alargue a modo de tercer partido–, de los penales errados y de la remontada final para terminar alzando la copa, me pregunto quiénes y de qué forma han movido y perpetuado el motor de la emoción para que, casi un siglo después, una camiseta –con el esfuerzo y la dedicación de los deportistas–, generación tras generación, construya y mantenga los hitos del pueblo detrás de la pelota. San José, 13 años después de su última vez, volvió a ganar el torneo del Sur y alcanzó su título número 18.

Fue un partido sensacional en un Martínez Monegal con muchísimos canarios y maragatos, que tuvo los condimentos necesarios para volverse inolvidable. Empezó ganando San José con un gol de Matías Nantes cuando se cumplía el primer cuarto de hora del segundo tiempo; lo empató Joaquín Irazoqui y fue él mismo quien, tres minutos después, con la mano, puso el 2-1 para Canelones.

Después vino el alargue, que funcionó como un tercer partido (San José había ganado la primera final 4-2). Los maragatos jugaron con nueve futbolistas. Tras el empate llegó la tanda de penales, en la que Canelones tuvo en la ejecución del cuarto penal (que dio en el palo) y del quinto (atajado por Manuel Silva) la posibilidad de alzar la copa. Recién en el noveno penal los maragatos lograron dar vuelta el resultado.

Ahora San José, que es el campeón, deberá enfrentar a Cerro Largo, que terminó tercero en el Este. El primer cruce entre ambos se jugará el sábado a las 22.15 en el Ubilla de Melo; la semana siguiente se definirá la serie en el Casto Martínez Laguarda.

Por su parte, Canelones, el vicecampeón, recibirá el domingo a las 22.15 a Salto, campeón del Litoral, y una semana después, definirán en el Dickinson.

Alargando la emoción

En su casa, Salto se coronó en el Litoral al vencer en el alargue a Río Negro 1-0, cuando ya se vislumbraba una definición por penales y en la penúltima corrida Leguizamón, el gran goleador salteño, con el muslo la mandó a guardar en el arco que da a la avenida Oribe, para que su equipo sumara el título número 14 del Litoral. Fue extremadamente costoso para los salteños, quienes en el minuto 90 perdieron 1-0 con el muy afiatado equipo de Río Negro. Debieron ir a alargue, porque en Fray Bentos la selección naranjera había ganado 3-1.

Como está dicho, ahora Salto enfrentará a Canelones y definirá en casa, mientras que la selección fraybentina, vicecampeona del Litoral, se enfrentará a Rocha, segunda del Este. En este caso, la ida será el domingo a las 20.00 en el Sobrero, y la definición será una semana después en el Liebig’s.

Hasta el final

Canelones del Este, de visita y de manera épica, consiguió abrochar su primer bicampeonato del Este. Fue espectacular el partido en el Sobrero, en un estadio que está divino. La pasión de la gente estuvo intacta, así como el esfuerzo de los deportistas en la cancha.

Rocha debía ganar para estirar la definición al alargue y a los penales, y lo buscó desesperadamente. Cuando faltaban siete minutos para el final, parecía que lo lograría con el gol de Germán Pérez, pero los partidos no terminan hasta que suena el silbato: ya en los descuentos, un impecable cabezazo de Damián Muniz puso el empate para los canarios del este y les dio el título.

Sólo restaba un minuto cuando Canelones logró el milagro y se armó un lío de aquellos. El juego no se reanudó tras los incidentes, y habrá que ver qué anotaron los árbitros en el formulario para saber con qué futbolistas se podrá contar para los próximos enfrentamientos de la Copa Nacional de Selecciones.

Canelones no ligó nada. Como campeón, deberá enfrentar a un tercero, que es nada menos que el actual campeón del Interior, Paysandú. Juegan el sábado a las 20.00 en Pando y una semana después en la capital sanducera. Paysandú accedió al tercer puesto del Litoral al volver a derrotar a Bella Unión, esta vez 5-0 en el estadio Artigas (en la ida había ganado 3-1), mientras que Cerro Largo terminó tercero en el Este al eliminar por diferencia de goles a Maldonado, al que derrotó 3-0 en el Salesianos de Melo, después de haber perdido 1-0 en la ida, en San Carlos.

Hay historia, hay gente, hay fútbol. Y hay futuro por escribir.

En juveniles fueron campeones Paysandú, Colonia y Maldonado

Los títulos de juveniles (desde hace unas temporadas es sub 17, pero cuatro décadas atrás era sub 20) se resolvieron desde el viernes, y en ninguna de las tres confederaciones se dio que una selección ganara en las dos categorías. El primer títulofue el del Este. Maldonado, de visitante, derrotó a Treinta y Tres 3-0 y por puntos se quedó con la copa. El sábado, en Nueva Helvecia, Colonia una vez más se apropió del Sur en juveniles al derrotar en apretado partido a San José 3-2, después de haber empatado en la ida 2-2. En el Litoral hubo necesidad de definir el título en alargue, a modo de tercer partido, y Paysandú, en casa, se quedó con la copa.