Dos informes sobre libertad de prensa y libertad de expresión fueron presentados esta semana, y en los dos Uruguay sale mal parado. El del Centro de Acceso a la Información Pública alerta sobre la creciente estigmatización de periodistas por parte de políticos y figuras gubernamentales, y el de Reporteros sin Fronteras registra una caída de ocho posiciones con respecto al año anterior en el ranking sobre libertad de prensa. “Es todo falso, todo mentira. Es un relato falso que inventan los periodistas opositores para ponerle palos en la rueda a este gobierno. Acá no se ataca a los periodistas. Y, si alguien en el exterior o dentro del país cree que es así, es todo culpa de los periodistas militantes”, se quejó una fuente de la Torre Ejecutiva. En el gobierno creen que para evitar seguir recibiendo informes negativos sobre Uruguay “el país tendría que empezar a vigilar un poco más a los periodistas y eventualmente legislar para que se pueda controlar lo que van a publicar. Sería la única manera de convencer al mundo de que en Uruguay se respeta la libertad de prensa”.

La advertencia: “Si siguen responsabilizando a la prensa por las denuncias de ataques a la prensa van a bajar hasta el infinito en el ranking, algo que nos complica desde el punto de vista matemático”. Integrante de Reporteros sin Fronteras.