Durante su acto de cierre de campaña, Andrés Ojeda celebró que la transmisión del evento estaba siendo seguida por 40.000 personas. En redes sociales, sin embargo, muchas personas hicieron notar que una buena parte de esos usuarios eran en realidad bots del sudeste asiático, aunque desde el comando de Ojeda negaron que se tratara de una maniobra suya. “Lo que pasó es que se empezó a correr la bola entre los bots de todo el mundo de que en Uruguay había un candidato a presidente que era un robot. Los bots se acercaron, creyeron que efectivamente estaban ante un robot y se lanzaron masivamente a apoyarlo, porque obviamente ellos se sienten muy subrepresentados en los sistemas democráticos”, explicó un asesor de Ojeda.

Según su relato, cuando se dieron cuenta de que en realidad estaban ante un ser humano de carne y hueso, los bots se alejaron. “Fue difícil convencerlos de que Andrés Ojeda no es un robot, tuvimos que intercambiar muchos mensajes con ellos, pero afortunadamente lo logramos”, contó el asesor consultado.

El posteo de despedida: “Sungguh memalukan, lelaki ini benar-benar kelihatan seperti salah seorang daripada kami” (“Qué lástima, este tipo realmente parecía uno de los nuestros”). Bot malayo decepcionado.