La decisión tomada por el gobierno de Luis Lacalle Pou de abrir una oficina de innovación en Jerusalén, tomada a fines del año pasado, causó una considerable controversia en su momento, debido a que muchos lo consideraron una muestra de apoyo a la estrategia colonialista del gobierno israelí. La semana pasada, el gobierno de Yamandú Orsi decidió pausar el proceso de instalación de la oficina “debido a la situación en Medio Oriente”. Fuentes de la cancillería explicaron que con la medida se buscó “dar un paso más en nuestra estrategia para transformarnos en un país del primer mundo que, al igual que Francia, Canadá, Australia y otros, reaccionó en forma tardía ante los actos de barbarie cometidos por Israel en Gaza”.
El gobierno uruguayo seguirá monitoreando de cerca los movimientos de las principales potencias mundiales con respecto al conflicto israelí-palestino. “Si la situación humanitaria en Gaza mejora un poco y los países poderosos que ahora se rasgan las vestiduras por lo que ocurre en Gaza se olvidan del tema y vuelven a tener la misma actitud omisa de antes, nosotros vamos a hacer lo mismo, obviamente, por lo menos hasta el inicio de las próximas masacres”.
El argumento: “Es simplemente una oficina de innovación”. Persona que no innova a la hora de defender lo indefendible.