En el marco de una investigación sobre tráfico de armas de fuego, la fiscal especializada en Estupefacientes Mónica Ferrero acordó la sentencia de dos funcionarios de la zona 4 de la Jefatura de Policía de Montevideo. Un policía fue condenado a diez meses de prisión y diez meses de libertad vigilada por un delito de concusión y tráfico ilícito de armas de fuego, municiones y materiales relacionados. También deberá pagar una multa de 100 unidades reajustables, unos 107.000 pesos, y fue inhabilitado por cuatro años.

En tanto, una policía fue condenada a seis meses de libertad vigilada y al pago de una multa de 50 unidades reajustables por un delito de concusión en calidad de cómplice. También se dispuso su inhabilitación, en este caso por dos años.

La maniobra fue descubierta a raíz de la denuncia de una persona a la que dos policías le retiraron sus armas de forma irregular, aludiendo que lo hacían a pedido de un jerarca. El hombre anotó la matrícula del patrullero y denunció el caso.

La investigación implicó escuchas telefónicas, el seguimiento del patrullero y ocho allanamientos en la zona del Cerro, donde fueron detenidas otras cinco personas que integraban la organización dedicada al tráfico de armas.

Según informó Subrayado, se está investigando si la organización está relacionada con el caso Lucas Langhain, el hincha de Nacional que en diciembre de 2019 fue asesinado mientras festejaba por la avenida 8 de Octubre.

El ministro del Interior, Jorge Larrañaga, dijo este viernes que dio instrucciones a la Dirección Nacional de la Policía para ser “implacable” en situaciones de corrupción policial, y destacó que el caso fue descubierto por el trabajo de la propia Policía en coordinación con la Fiscalía. “Nosotros defendemos a la institución policial y vamos a defender a los buenos policías, pero vamos a combatir la corrupción esté en donde esté. Me parece que es un objetivo central para sanear las instituciones públicas”, afirmó el ministro en conferencia de prensa.

“No son los únicos y vamos a seguir [investigando] en todo el país, porque son cosas que no se pueden tolerar bajo ningún punto de vista. Un policía corrupto genera un mal en la institución y un descreimiento en la población que no vamos a permitir”, agregó Larrañaga. También informó que se están realizando inspecciones para controlar el consumo de drogas en todos los policías del país.