Trabajadores afectados por la explosión de las instalaciones del Laboratorio Fármaco Uruguayo, ocurrida el 10 de diciembre, presentaron una denuncia penal contra la empresa, por entender que existió responsabilidad en el accidente, según informó a la diaria el abogado Óscar López Goldaracena.

Siete trabajadores denunciaron ante la fiscal de Flagrancia de 2° turno, Patricia Rodríguez, que las salidas de emergencia de la planta del laboratorio estaban obstruidas y que no existía un plan de evacuación.

Según señalaron en la denuncia, una de las salidas de emergencia estaba bloqueada por una pared de yeso y en la otra se había instalado una cinta transportadora que hacía imposible su uso.

Los denunciantes entienden que los responsables del laboratorio incurrieron en el delito previsto por el artículo 1 de la Ley de Responsabilidad Empresarial (19.196), que establece una pena de tres a 24 meses de prisión para los empleadores que “no adoptaren los medios de resguardo y seguridad laboral previstos en la ley y su reglamentación, de forma que pongan en peligro grave y concreto la vida, la salud o la integridad física del trabajador”.

También se incluye en la denuncia el delito de lesiones graves previsto para los casos en los que la lesión implica una inhabilitación para el trabajo por más de 20 días. El artículo 317 del Código Penal establece una pena de 20 meses de prisión a seis años de penitenciaría.

“Yo me enteré de que hubo una explosión porque se me cayó el techo encima, quedé en el piso de arriba con unos compañeros. Salimos hacia un lugar que no tenía salida de emergencia y dos compañeros, que terminaron sangrando, lograron abrir un agujero en una ventana a fuerza de puño, y por ahí salimos”, contó a la diaria Viviana Zugarramurdi, una de las trabajadoras denunciantes.

La trabajadora señaló que en el laboratorio habitualmente sonaban las alarmas de seguridad y los empleados salían de la planta. “Nos decían que hiciéramos caso omiso a esas alarmas porque se activaban solas. El día del accidente esas no se activaron, se activaron otras, 40 segundos antes de la explosión”, recordó.

En el accidente resultaron lesionados unos 30 trabajadores, de los cuales 14 quedaron internados en el hospital del Banco de Seguros. A raíz del hecho, la empresa envió a 80 trabajadores a seguro de paro y continuó su actividad en otras instalaciones.

“El día del incidente mandaban a la gente para sus casas, que no fueran al Banco de Seguros, nunca nos llamaron para ver cómo nos sentíamos, hasta el día de hoy”, expresó Zugarramurdi, que está certificada hasta el 17 de marzo por las lesiones sufridas.

La trabajadora dijo que hay documentación en manos de Fiscalía con evidencia de que los reclamos de seguridad por parte de trabajadores se vienen planteando al menos desde 2018, tanto en ámbitos bipartitos como tripartitos, y nunca obtuvieron respuesta de la empresa.

“Queremos que se empiece a trabajar en seguridad en la industria farmacéutica porque acá los regalados siempre somos los trabajadores”, agregó.