La corte integrada para analizar la filtración de los votos de los ministros de la Suprema Corte de Justicia (SCJ) desde el despacho del expresidente Tabaré Sosa resolvió archivar el caso, según informaron a la diaria fuentes judiciales.
Tras un proceso que implicó la declaración de todos los involucrados directos, la corte integrada por los ministros Beatriz Larrieu, Fernando Tovagliare, Gustavo Mirabal, Mónica Ivanovich y Mónica González no encontró pruebas de que la jueza letrada adscrita a la SCJ, Sofía Feuer, asesora de Sosa, hubiera filtrado información a su pareja, que era el abogado de una de las partes en un litigio civil.
El caso ocurrió en julio de 2020, cuando los ministros de la SCJ Bernadette Minvielle, Eduardo Turell, Luis Tosi, Tabaré Sosa y Claudia Kelland analizaban un recurso de casación en materia civil. Minvielle, Turell y Tosi tenían una posición contraria a la del abogado Andrés Mariño, pareja de Feuer, mientras que la opinión de Sosa y Kelland era favorable a sus intereses.
Los abogados de la contraparte, Pablo Donnangelo y Heber Gatto, advirtieron que a medida que los ministros se iban pronunciando, en un proceso reservado, Mariño y su socio, Giacomino Di Matteo, recusaban a sus adversarios.
Cada caso es estudiado en forma rotativa por los cinco ministros de la corte. Cada ministro tiene dos asesores que lo analizan. Cuando el ministro tiene una definición deja su voto en un sobre en la tapa del expediente y luego el expediente es remitido al siguiente ministro. Este caso fue primero estudiado por Minvielle, después por Sosa, por Turell, por Kelland y por Tosi. Cuando están los cinco votos, el tema se trata en acuerdo y uno de los ministros redacta la sentencia.
Los abogados que denunciaron a Feuer señalaron que el mismo día que culminó el estudio del caso, Di Matteo y Mariño recusaron a Turell para impedir la emisión de la sentencia y luego presentaron un recurso de inconstitucionalidad contra el artículo 328.6 del Código General del Proceso, que regula el procedimiento de la recusación. Según los abogados demandantes, ese recurso de inconstitucionalidad tenía como objetivo dilatar la resolución de la SCJ para que Turell cumpliera los 70 años que lo obligan a retirarse y deshacerse así de su posición.
Turell fue recusado por Di Matteo y Mariño porque en el proceso Donnangelo y Gatto presentaron una consulta realizada por Gabriel Valentin y Juan Andrés Ramírez, quien es primo segundo de Turell. Luego recusaron a Minvielle por considerar que había existido una relación profesional con Valentin, porque hace varios años la ministra lo contrató como defensor particular en un asunto personal. Cuando la corte rechazó la recusación Turell advirtió que los abogados Di Matteo y Mariño mostraron un documento en el que un colega les advertía el 13 de julio que Ramírez y Turell eran primos segundos. Para comprobar el parentesco presentaron una partida de nacimiento del bisabuelo de ambos expedida el 10 de julio, tres días antes de ser advertidos de la situación.
La causa civil que originó esta investigación administrativa está siendo estudiada por una corte designada expresamente para el caso, dado que los ministros de la SCJ optaron por abstenerse de actuar ante la denuncia de filtración. La decisión final sobre el recurso de revisión en la causa civil está en manos de los ministros Rosario Sapelli, Ana Rivas, Guzmán López, Ana Maggi y Álvaro Messere.