La jueza penal de 27° turno, Silvia Urioste, procesó con prisión al militar en situación de reforma Ernesto Ramas por el homicidio de los militantes comunistas Fernando Miranda y Eduardo Bleier ocurridos en 1975, según informó el portal 257 y confirmó la diaria.

Urioste dispuso el procesamiento con prisión de Ramas por dos delitos de homicidio muy especialmente agravado en régimen de reiteración real. Ramas se encuentra cumpliendo prisión domiciliaria, procesado por otras cinco causas que investigan crímenes de lesa humanidad y condenado por el homicidio de 28 personas en la primera sentencia sobre violaciones a los derechos humanos de la dictadura y por la causa en la Justicia italiana que investigó el Plan Cóndor.

En la sentencia, a la que accedió la diaria, la jueza Urioste señala que los operativos de detención de Bleier y Miranda fueron realizados por integrantes de las Fuerzas Conjuntas, que los llevaron al centro de detención clandestino 300 Carlos, que estaba a cargo del Organismo Coordinador de Operaciones Antisubversivas (OCOA).

“Los responsables de la detención, torturas y muerte de los detenidos fueron el General Esteban Cristi, el Coronel Julio González Arrondo y el indagado Ernesto Ramas”, señala el auto de procesamiento basándose en que Cristi era el comandante de la División de Ejército I, González Arrondo era el segundo comandante y Ramas era el jefe de la División de Operaciones del OCOA.

La sentencia señala que Ramas “no sólo era quien daba directivas sobre detenciones e interrogatorios, sino que era informado de todo lo que ocurría con los prisioneros y, responsable directo de los operativos del equipo de represores que operaba en el 300 Carlos”.

Entre varios testimonios considerados por la jueza para definir el procesamiento se encuentra el brindado por el militar en situación de reforma Jorge Pajarito Silveira, quien declaró ante un tribunal de honor que en diciembre de 1975 fue destinado a la División de Ejército I en comisión en la OCOA y pasó a depender de Ernesto Ramas.

También fue tomado en cuenta el testimonio del entonces oficial de enlace de la Fuerza Aérea en la OCOA, Bernabé Saralegui, quien dijo que el 300 Carlos “era el cerebro de la OCOA”. “Ahí estaban los oficiales con el grado de mayor y los oficiales subalternos con el trabajo de campo [...]. Los ejecutores de las detenciones, los que nombramos en primera instancia. Rama, [Rudyard] Scioscia”, declaró.

Fernando Miranda fue detenido el mediodía del 30 de noviembre de 1975 cuando llegaba a su casa en el Parque Batlle, en un operativo en el que actuaron Ramas y Eduardo Ferro. Fue trasladado al 300 Carlos, donde fue torturado y luego asesinado de un golpe en la nuca entre el 1º y el 2 de diciembre de 1975, durante el traslado a un interrogatorio. Sus restos fueron hallados el 2 de diciembre de 2005 en el predio del batallón 13, contiguo al galpón donde funcionaba el 300 Carlos.

Eduardo Bleier fue detenido en la calle en la noche del 29 de octubre de 1975. Bleier, de 47 años, integraba el Comité Central del Partido Comunista del Uruguay y era el secretario de finanzas departamental del partido. Fue trasladado al centro de torturas conocido como 300 Carlos R, y unos días después al 300 Carlos, donde fue reconocido por otras víctimas del terrorismo de Estado. Bleier murió bajo tortura entre el 1º y el 5 de julio de 1976. Sus restos fueron encontrados el 27 de agosto de 2019 en el predio del batallón 13, a unos 100 metros de donde fueron hallados los restos de Miranda.

En una primera versión de este artículo se decía que Ramas fue condenado, cuando lo correcto es decir que fue procesado. A los involucrados y a los lectores las disculpas del caso.