El Ministerio del Interior (MI) tiene un convenio con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para que se financie un nuevo plan para la prevención de los homicidios. Según apuntó el ministro Luis Alberto Heber en rueda de prensa este martes, la financiación está aprobada y se presentará la estrategia a todos los partidos políticos con representación parlamentaria en una reunión en febrero.

“Ya se ha probado por parte del BID un trabajo sobre prevención de homicidios, que es una de las líneas de trabajo que venimos haciendo en un programa que aporta al trabajo integral del Estado en los barrios, pero también como un punto especial la prevención de homicidios, de modo de poder abordar las causas y tratar de evitarlos”, dijo Heber luego de presentar las cifras de delitos de 2022, en las que los homicidios aumentaron 25,2% en comparación con 2021.

El monto total de la financiación es de 10 millones de dólares y para este plan concreto sobre prevención de los homicidios se destinará unos dos millones de dólares, según aclaró Heber este miércoles en diálogo con Desayunos Informales.

“El plan es un plan que ha tenido éxito en otras partes del mundo, lo va a financiar con dos millones de dólares el BID y es poner gente que ha tenido vinculación con el delito, reclutarla, de modo tal que tenga una conexión diferente”, explicó el ministro y agregó que entre quienes están vinculados al delito y los que no “parecería que se genera una especie de grieta muy grande, muy profunda y de incomunicación sobre todo”.

Según Heber se trabajará con “exreclusos, gente que ha cumplido con su pena, que ha sido reeducado, que se ha integrado a la sociedad, pero que tiene un nivel de comunicación y léxico diferente al que puede tener cualquiera de ustedes o yo”.

Heber subrayó que estas personas reclutadas podrían hacer tareas que la Policía no puede y que tampoco pueden hacer quienes trabajan en Inteligencia: “las labores de Inteligencia no son para tener contacto y meterse en una célula delictiva, no podemos hacer esa tarea desde el MI, pero nos puede ayudar socialmente a tener un nivel de contacto para poder resolver de otra manera conflictos que se dan dentro de la delincuencia, sin ser integrantes de la misma organización. No es un infiltrado, es una persona que cumplió su pena, que tiene un historial y que por ese historial puede tener un nivel de contacto”.

El ministro detalló que el primer paso es “reclutarlos” y tratar de “contactar los grupos, los violentos, tener un nivel de comunicación que no los podemos tener oficialmente nosotros, el MI está para prevenir y reprimir el delito”. Heber insistió con que estas personas “no serían oficiales, sería gente que trabaja para el BID en una tarea social que no tiene una vinculación laboral con el ministerio, sino un trabajo social contratado por el BID”.

“Nosotros tenemos mente abierta para escuchar propuestas que puedan ayudarnos a poder resolver definitivamente estos casos, no sé si es la solución, pero ha tenido resultados en otra parte del mundo”, comentó Heber.