Las pericias realizadas en el lugar del accidente en el que murió el senador colorado Adrián Peña determinaron que el siniestro ocurrió a causa de un error humano, según informó este martes el director de comunicación de la Fiscalía, Javier Benech.

La fiscal responsable de la investigación, Barbara Zapater, recibió las pericias de accidentología vial que determinaron que el accidente, ocurrido el 4 de abril a la altura del kilómetro 30 de la ruta 36, en Canelones, no se debió a una falla mecánica.

En tanto, la pericia toxicológica determinó que el senador no tenía alcohol en sangre. Peña, que se dirigía hacia el sur, invadió la senda contraria y chocó de frente contra un auto que era conducido por un hombre de 27 años que sufrió varios traumatismos.

Según las cámaras de seguridad del lugar, el vehículo que era conducido por Peña no llegó a frenar antes del impacto, lo que coincide con la declaración de tres testigos del hecho.

“Lo que se pudo determinar es que el senador no venía con el cinturón de seguridad puesto. Tampoco venía -que a veces es usual- tomando mate o tomando alguna bebida. No se relevó nada de eso en la escena; sí se encontró el celular de él caído en el piso del auto, pero pudo haber sido por el impacto”, había expresado la fiscal horas después del accidente.