La fiscal de primer turno de San Carlos, Mabel Brites, formalizó la investigación contra Maximiliano Jesús Núñez de León, de 31 años de edad, como presunto homicida de Facundo Torres Furtado, cuyos restos calcinados fueron encontrados en la madrugada del sábado junto a la vía férrea, al norte de la ciudad. También le imputó un delito continuado de negociación de estupefacientes, un delito de tráfico interno de armas y municiones, y un delito “en concurrencia formal” por tenencia de arma de fuego.

Fuentes del caso indicaron a la diaria que Núñez pertenece a una banda de narcotraficantes del barrio Asturias de la ciudad, y aclararon que la investigación continúa en busca de más personas implicadas.

De acuerdo al parte emitido por la Jefatura Departamental de Policía, los investigadores carolinos tenían información desde el 30 de noviembre de que Núñez vendía drogas, compraba artículos robados y efectuaba disparos al aire en su domicilio ubicado en la calle 4 de Octubre, en el barrio Lavagna. En consecuencia, el 1° de diciembre se realizó un allanamiento en presencia de la pareja del propietario, ya que este se fugó por el patio de un vecino.

El procedimiento derivó en la incautación de un revólver marca Rossi, 77 envoltorios de cocaína, marihuana, celulares, dinero, dos motos y un carro de mano, tres bordeadoras, dos parlantes, una bicicleta marca Trek y dos televisores. Paralelamente, Núñez quedó requerido por la Justicia.

Por otra parte, en la madrugada del 2 de diciembre se encontraron los restos calcinados de un hombre cerca del puente de la vía férrea, al norte de la ciudad. El cuerpo fue trasladado a la morgue, con la presunción de que podía tratarse de Facundo Torres Furtado, un joven de 29 años cuya ausencia había sido denunciada el 29 de noviembre por sus familiares.

La identidad se confirmó al mediodía de este martes 5 mediante pericias de ADN, sobre lo cual fueron informados los familiares por la fiscal Brites. A esa altura, la investigación policial había llevado hasta una casa ubicada en la calle Pedro de Zeballos, una presunta boca regenteada por Núñez donde habría ocurrido el homicidio. Allí se recogieron colillas de cigarrillos, muestras de una “mancha pardo rojiza” y un pantalón que fueron periciados y permitieron ubicar en la escena al fallecido y a Núñez, quien seguía prófugo.

La Policía instaló “puestos de observación” en varios puntos de la ciudad, y una patrulla que realizaba recorridas en busca de este hombre logró avistarlo en la calle Fernández Chávez. El prófugo intentó escapar nuevamente, pero fue detenido a una cuadra del lugar. Este martes 5, el presunto homicida compareció ante las autoridades judiciales y fue imputado por los delitos antes mencionados. Mientras transcurre la investigación formal, fue enviado a la cárcel por 180 días.