Luego del asesinato de 18 niños y dos maestras de la escuela primaria Robb a manos de Salvador Ramos, un joven de 18 años que ingresó al edificio con un rifle y una pistola, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, pidió a la población “plantarse ante el lobby de las armas” y planea visitar el estado en los próximos días.
Las declaraciones de Biden se contraponen a las del fiscal general de Texas, el republicano Ken Paxton, que en una conferencia de prensa tras la matanza planteó que la solución a los tiroteos en escuelas es armar a los docentes, según informó la cadena BBC.
Desde mayo de 2021 en el estado de Texas es legal que los ciudadanos porten armas en la vía pública, sin necesidad de un permiso especial para ello. Ramos, el joven de 18 años que llevó a cabo la masacre, llevaba un rifle de asalto y un equipo táctico, e ingresó al lugar a través de una puerta trasera. Días antes, a poco de haber cumplido la mayoría de edad, había comprado dos rifles y cientos de municiones.
El joven anunció en Facebook lo que haría 15 minutos antes de empezar con el ataque. Minutos antes, también atacó a su abuela, disparándole en la cara. La mujer sobrevivió y llamó a la Policía. Mientras tanto, Ramos huía en auto y estrellaba el vehículo cerca de la escuela. El segundo rifle quedó dentro del auto.
Andy Stone, vocero de Meta, dijo a la prensa estadounidense que la empresa está “cooperando plenamente” en la investigación del caso.
El presidente está trabajando con sus asesores para llevar a cabo este fin de semana la visita a Uvalde, la ciudad donde se encuentra la primaria Robb.
El ataque de Ramos, que fue abatido por un agente de la Patrulla Fronteriza y además de los 18 niños y las dos maestras muertos dejó a otras 17 personas heridas, se produjo sólo diez días después de que un supremacista blanco disparara contra 13 personas en un supermercado en un barrio de población mayoritariamente afrodescendiente en Buffalo, provocando la muerte de diez de ellas.
“Cómo nación, tenemos que preguntarnos cuándo, en el nombre de Dios, vamos a hacer frente al lobby de las armas”, dijo el presidente estadounidense en una conferencia de prensa el martes.
“¿Por qué en ningún otro país ocurre lo que en Estados Unidos cuando también en ellos tienen problemas de salud mental, disputas domésticas, personas que están perdidas?”, se preguntó Biden, quien afirmó estar “asqueado y harto” de que estas situaciones se repitan.
Por otro lado, el papa Francisco también emitió una declaración pidiendo el fin de la “circulación indiscriminada de armas”. “Tengo el corazón roto por la masacre en el colegio de primaria en Texas. Rezo por los niños y adultos asesinados y por sus familias”, dijo el pontífice argentino.
La masacre perpetrada por Ramos recuerda dolorosamente a la matanza de la escuela primaria de Sandy Hook ocurrida en diciembre de 2012, cuando Adam Lanza, de 20 años, mató a su madre y luego se dirigió a la escuela con un fusil semiautomático y dos pistolas, con las que asesinó a 20 niños y seis adultos, para finalmente suicidarse.
La masacre, ocurrida durante el gobierno de Barack Obama y con Biden como su vicepresidente, provocó un discurso del entonces mandatario en el que pidió “unirnos y tomar medidas significativas para evitar más tragedias como esta, independientemente de la política”.