En su primera comparecencia pública desde que dejó el cargo hace seis meses, la exmandataria alemana Angela Merkel defendió su política frente a Rusia y dijo que no tiene que “excusarse” al haber abogado por la diplomacia y el comercio para tratar de evitar una guerra en Ucrania.
En una charla realizada en Berlín organizada por la editorial Aufbau, consignada por la cadena Deutsche Welle, la política que condujo a la nación germana durante 16 años explicó que, por ejemplo, a mediados del año pasado, meses antes de culminar su mandato, no pudo sacar adelante una iniciativa europea para traer de vuelta al presidente ruso, Vladimir Putin, a la mesa del diálogo.
No obstante, mirando hacia atrás, Merkel dijo tener cierta “tranquilidad” de saber que se esforzó al máximo para impedir la situación actual y que tiene total confianza en la gestión de su sucesor, el socialdemócrata Olaf Scholz.
Con relación a las acusaciones que apuntan contra ella acerca de que fue ingenua al creer que Rusia podría cambiar su postura a través de las relaciones comerciales con los países occidentales, Merkel afirmó que nunca se hizo “ilusiones” de ello, pero afirmó que no se podía hacer de cuenta como si un país vecino del tamaño y la importancia de Rusia “no existiera”.
La excanciller señaló que desde hace tiempo sabía que Putin “quería destruir Europa”, pero que antes de entrar en un conflicto abierto era necesario “intentarlo todo desde el punto de vista diplomático”.
Merkel resumió su política con respecto al gobierno de Putin como “encontrar un modus vivendi en el que no estemos en guerra sino intentemos coexistir a pesar de nuestras diferencias”.
La exjerarca dijo también que la habían “molestado” las sanciones impulsadas por Estados Unidos con motivo de la construcción del gasoducto Nord Stream 2 -un millonario proyecto conjunto llevado adelante por los gobiernos de Alemania y Rusia junto a varias empresas petroleras privadas europeas- ya que eso es algo que “se hace con un país como Irán, pero no con un aliado”. Durante la entrevista, Merkel defendió también la decisión adoptada en la cumbre de Bucarest de 2008 de no otorgar a Ucrania el estatus de país candidato a entrar a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), ya que entonces no se trataba de un país “democráticamente firme” y estaba “dominado por oligarcas”.
Agregó que, desde la perspectiva de Putin, darle ese beneficio a Ucrania en ese momento se hubiera tratado además de una “declaración de guerra” a la que hubiera reaccionado causando un gran daño a Kiev, en línea con su política de intervenir en los países del entorno ruso que trataban de orientarse hacia Occidente.
Merkel de todas maneras no dudó en condenar la actual situación y manifestó que el Kremlin cometió un “error catastrófico” al invadir Ucrania, acción que consideró “un ataque brutal, que desprecia el derecho internacional y no tiene excusa”.
“Si empezamos a mirar hacia los siglos pasados y decir a quién pertenece este pedazo de territorio, sólo habría guerras”, expresó Merkel. “Eso no es posible”, sentenció la exlíder demócrata cristiana.
Avance ruso en Severodonetsk y palabras de Zelenski
Autoridades rusas afirmaron este martes tener el control de todas las zonas residenciales de Severodonetsk, ciudad clave ubicada en el óblast de Lugansk, en la región del Donbás, donde las tropas ucranianas combaten ante unidades rusas que las superan ampliamente en número. “Las zonas residenciales de Severodonetsk fueron liberadas por completo”, declaró el ministro ruso de Defensa, Sergei Shoigu, en una alocución difundida por televisión, consignada por la agencia AFP.
El ejército ruso aún trata de controlar “la zona industrial y las localidades vecinas”, agregó Shoigu. El propio presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, expresó en las últimas horas que las fuerzas de su país en la ciudad estaban superadas en número y que los rusos estaban en una posición “más fuerte”.
Paralelamente, Zelenski dijo este martes que su gobierno no va a llegar a un acuerdo con el de Rusia para lograr un estancamiento en el campo de batalla y que su objetivo es recuperar el control de todo el territorio ocupado por Moscú desde que comenzó la invasión.
“Ya hemos perdido a demasiadas personas como para simplemente ceder nuestro territorio”, dijo el presidente ucraniano en su intervención por videoconferencia en un evento organizado por el periódico inglés Financial Times, y agregó que un punto muerto “no es una opción” para Kiev. “Tenemos que lograr recuperar todo nuestro territorio”, manifestó.