Este martes un avión de Japan Airlines colisionó contra un aeroplano de la Guardia Costera de Japón que iba a auxiliar a la zona del terremoto ocurrido el lunes. En el avión comercial viajaban 367 pasajeros y 12 miembros de la tripulación; todos ellos fueron evacuados de forma segura, según informó la agencia de noticias japonesa Kyodo.
Por otro lado, cinco de los seis miembros de la tripulación de la Guardia Costera murieron después de haberse reportado como desaparecidos, y una persona logró escapar, confirmaron autoridades japonesas.
El vuelo 516, que entre sus pasajeros tenía ocho niños menores de dos años, había despegado del aeropuerto de New Chitose, en Hokkaido, con destino al aeropuerto de Haneda, donde ocurrió el choque, según informó la agencia de noticias NHK.
Según declaró una fuente de la Guardia Costera de Japón (JCG) a CNN, el avión militar iba desde el aeropuerto de Haneda a una base aérea de la JCG ubicada en la prefectura de Niigata –lugar afectado por el terremoto– para auxiliar en tareas de socorro tras el sismo.
Todavía no ha sido clarificado el motivo del accidente; ni la Guardia Costera ni la Agencia Meteorológica lo determinaron, ya que previamente no se habían generado condiciones meteorológicas adversas ni vientos fuertes.
Por su lado, el primer ministro de Japón, Fumio Kishida, instó a los ministerios relevantes a hacer todo el esfuerzo para investigar los motivos del choque y así proveer información sobre el hecho a la población de forma apropiada, según consignó Kyodo.
El incendio producido por la colisión forzó al aeropuerto de Haneda a cerrar las pistas, de acuerdo con el ministerio de transporte, cartera que lidera la investigación sobre las causas del accidente.