El próximo domingo, después de una extensa campaña electoral que está llegando a su fin, se realizarán las elecciones presidenciales chilenas, en las que se elegirá al sucesor del actual mandatario, Gabriel Boric.

En realidad, desde hace meses todas las encuestas indican que el próximo presidente del país no se conocerá este domingo: los sondeos coinciden en que esto recién sucederá en el balotaje, fijado para el 14 de diciembre.

También las empresas encuestadoras viene marcando que la candidata más votada será la oficialista Jeannette Jara, quien promedia algo más del 30% de las preferencias, seguida por el postulante del Partido Republicano, el ultraderechista José Antonio Kast, quien supera el 20% de las adhesiones.

Más atrás se ubica el resto de los postulantes: Evelyn Matthei, candidata de la derecha tradicional, que en esta ocasión se presenta en forma de coalición con el nombre de Chile Grande y Unido; el libertario Johannes Kaiser; el populista Franco Parisi, del Partido de la Gente; y los tres postulantes independientes: el centroizquierdista Marco Enríquez-Ominami, el periodista y exdirigente deportivo Harold Mayne-Nicholls y el ultraizquierdista Eduardo Artés.

Pero en estos días finales de la campaña los equipos están concentrados en captar al 20% de los encuestados que, con variaciones de acuerdo con las encuestas, declararon no tener su voto definido.

En esta instancia, convencer a esta parte del electorado tiene una influencia determinante, ya que por primera vez las elecciones presidenciales chilenas serán obligatorias.

De acuerdo con lo que recordó el portal France 24, la obligatoriedad del voto en Chile no es novedosa. De hecho, estaba consagrada en la Constitución de 1925 y, con el regreso a la democracia en 1990 tras la dictadura de Augusto Pinochet, fue reinstaurada, pero únicamente para aquellos ciudadanos que se registraran, un proceso que era opcional.

En 2012 el país pasó a un mecanismo de voto voluntario, pero con inscripción automática. Es decir, todos los mayores de edad estaban habilitados para sufragar, pero sin la obligación de hacerlo, lo que con el correr de años llevó a un desgaste del electorado que derivó en niveles elevados de ausentismo.

Esto les fue quitando, en cierta medida, legitimidad a los mandatarios electos. Por eso, en 2022 el Congreso, con una amplia mayoría, resolvió volver a la obligatoriedad e imponer sanciones a quienes no voten.

El debate final

A cinco días de las elecciones, en la noche del lunes tuvo lugar el último debate, que tuvo como principales protagonistas a quienes lideran las encuestas: Jara y Kast.

Según informó Radio Universidad de Chile, la candidata oficialista, integrante del Partido Comunista, y su adversario de extrema derecha tuvieron varios cruces directos durante el evento.

El primero de ellos se relacionó con una investigación periodística que reveló que la Asociación de Administraciones de Fondos de Pensiones (AFP) financió, sin revelarlo, a la fundación Ciudadanos en Acción.

La organización, liderada por Bernardo Fontaine, asesor económico de Kast, habría articulado campañas digitales contra la reforma previsional y ataques a candidaturas presidenciales, además de ataques contra algunos postulantes, en particular contra la oficialista.

Hablando sobre el tema, Jara manifestó: “Una de las cosas que voy a impulsar es saber qué pasa con la plata de las AFP, la que se gasta en publicidad. En particular, en el asesor del candidato Kast, Bernardo Fontaine, que, además, fue un activo opositor a cualquier reforma previsional. Eso hay que transparentarlo, porque el movimiento se llamaba ‘Con mi plata no’ y resulta que, con la plata de los propios afiliados, hoy día se está financiando trolls y bots que atacan a los otros candidatos”, acusó la candidata oficialista.

Kast no respondió directamente al emplazamiento y en lugar de eso –táctica que empleó durante muchas de sus intervenciones– se centró en atacar la gestión de Boric.

“¿Tienen ordenado el presupuesto? ¿Gastan lo que les ingresa? No han sido capaces de ordenar el presupuesto en tres años, siempre han calculado mal los ingresos y han gastado más de lo que tienen. Entonces es fácil prometer, es fácil decir: ‘Nosotros vamos a arreglarles la vida a todos’, pero se lo han gastado todo”, sostuvo.

En esa misma línea, cuando los candidatos fueron instados a elegir quién de sus contrincantes tiene las propuestas más populistas, Kast apuntó contra Jara.

“Vamos a cumplir cuatro años de gobierno, de gobierno populista que prometió una cosa y no hizo nada. Menos violencia, menos pobreza, más vivienda, más salud. Es como el país de las maravillas lo que propone la candidata de la continuidad. Todo su programa es de un populismo total”, dijo el candidato favorito a suceder a Boric.

Jara, en tanto, no quiso usar la palabra populismo, pero sí aludió a una “irresponsabilidad” de Kast y de los candidatos Evelyn Matthei y Johannes Kaiser, líder del Partido Nacional Libertario.

“Aquí algunos proponen recortes como si esto fuera una competencia o una subasta, y la verdad es que sólo para que la ciudadanía tenga un parámetro de lo que aquí se está hablando, reducir 6.000 millones de dólares en los ingresos fiscales, si uno lo compara con lo que Chile gasta en PGU todos los años, estamos hablando de 6.500 millones de dólares. Decir que van a reducir los gastos sin afectar el gasto social no es verdad”, afirmó Jara.

También en el debate la atención estuvo puesta en Evelyn Matthei, quien, completamente desbordada por los candidatos de extrema derecha, se enfrentaba a una última oportunidad de diferenciarse de Kaiser y Kast.

A este último la candidata lo criticó por usar un escudo de vidrio durante su cierre de campaña en un acto en la ciudad de Viña del Mar.

“Durante ocho años luché como alcaldesa en contra del crimen organizado, en contra de la delincuencia, del comercio ilegal. No me escondí nunca detrás de un vidrio, lo que hice fue proteger más bien a los vecinos, a los patrulleros, a los carabineros, a la gente que está haciendo la pega”, remarcó Matthei.

“En vez de protegerme yo, voy a protegerlos a ellos y vamos a respaldar con todo a los Carabineros y también a las Fuerzas Armadas para que puedan hacer uso de su armamento”, agregó la candidata.