Después de varios meses de negociaciones, en las primeras horas de la noche de este jueves, desde Washington el gobierno de Estados Unidos anunció que llegó a un acuerdo comercial con Argentina, entendimiento que incluye la apertura de mercados, la cooperación en propiedad intelectual, estándares técnicos, comercio digital y normas agrícolas.

El diario La Nación informó que el acuerdo fue anunciado en el momento en el que el canciller argentino, Pablo Quirno, estaba reunido en la capital estadounidense con el secretario de Estado, Marco Rubio.

Según lo publicado por la administración que encabeza el presidente Donald Trump, el denominado Marco para un Acuerdo sobre Comercio e Inversión Recíprocos busca “impulsar el crecimiento sostenido, ampliar oportunidades de intercambio y establecer reglas más transparentes para empresas e innovadores”.

De acuerdo a lo que consignó eldiarioAR.com, la iniciativa se apoya en las “reformas económicas que Argentina ya ejecutó para modernizar su régimen comercial y mejorar las condiciones para los inversores”.

La noticia encontró al mandatario argentino Javier Milei en la provincia de Corrientes, donde había ido para participar en una actividad. El libertario definió el acuerdo como una “tremenda noticia” y reafirmó que su gestión está “fuertemente comprometida con hacer grande la Argentina nuevamente”.

También ironizó que los 14 viajes que hizo a Estados Unidos durante su gestión “estuvieron rindiendo un poquito”, al destacar inversiones de empresas de ese país en el territorio argentino.

Al exponer en el Congreso de Economía Regional del Club de la Libertad de la provincia de Corrientes, Milei dijo que “en el momento en que llegábamos al poder Argentina estaba camino a convertirse en Venezuela”.

“Eso era mucho más factible y tangible de lo que parecía”, agregó el presidente, cuya posición política quedó muy fortalecida luego de las elecciones legislativas de octubre, en las que su fuerza política fue la más votada prácticamente en todo el país.

El acuerdo también fue muy celebrado por varios jerarcas de la actual administración. Uno de los primeros funcionarios en hablar al respecto fue el flamante jefe de Gabinete, Manuel Adorni, quien en un mensaje en su cuenta de X expresó: “Amplio acuerdo comercial con los Estados Unidos: menos aranceles, más mercado, más libertad. Dios bendiga a la República Argentina”.

Los puntos más importantes del acuerdo, que vale la pena aclarar que no se trata de un acuerdo de libre comercio, prevén nuevas condiciones de intercambio entre los países. Según lo que informó Ámbito Financiero, Argentina otorgará preferencias arancelarias a exportaciones estadounidenses como medicamentos, productos químicos, maquinaria industrial, tecnología, dispositivos médicos, vehículos y productos agrícolas.

Por su parte, Estados Unidos eliminará aranceles para ciertos recursos naturales no disponibles y artículos para uso farmacéutico. Además, ambos países mejorarán el acceso bilateral en carne vacuna, un punto que a lo largo de la historia ha sido particularmente sensible.

El gobierno de Estados Unidos también indicó que tendrá en cuenta el impacto del acuerdo al evaluar medidas bajo la Sección 232, que habilita restricciones comerciales por motivos de seguridad nacional.

El acuerdo al que llegaron Washington y Buenos Aires también promueve el fin de barreras comerciales no arancelarias. Argentina se comprometió a continuar desmontando trabas al comercio, entre ellas licencias de importación y requisitos consulares. A su vez, se acordó que eliminará gradualmente la tasa estadística aplicada a bienes estadounidenses.