En un clima de suma cordialidad, el presidente estadounidense, Donald Trump, recibió este viernes en la Casa Blanca al primer ministro húngaro, Viktor Orbán, en un encuentro en el que el anfitrión pasó por alto las diferencias sobre el uso de petróleo ruso por parte de Hungría, así como sus disputas con otros miembros de la Unión Europea (UE) en materia de inmigración y su visión sobre la guerra en Ucrania.

Orbán, el principal aliado de Trump en Europa, fue recibido por el republicano por primera vez desde que retornó a la presidencia, y explicó por qué su país necesitaba usar petróleo ruso en un momento en el que Trump está presionando a los países europeos para que dejen de hacerlo.

De acuerdo con lo que consignó Reuters, Orbán afirmó que el tema era vital para Hungría, y se comprometió a exponer “las consecuencias para el pueblo húngaro y para la economía húngara en caso de no obtener petróleo y gas de Rusia”.

Trump, quien viene llamando a Europa a que evite usar energía rusa con el fin de presionar a Moscú para que ponga fin a su guerra con Ucrania, se mostró comprensivo con la postura de Orbán.

“Lo estamos analizando, porque para él es muy diferente obtener petróleo y gas de otras zonas”, dijo Trump. “Como saben, no tienen la ventaja de tener mar. Es un gran país, un país grande, pero no tienen mar. No tienen puertos”.

Las cifras del Fondo Monetario Internacional muestran que Hungría dependía de Rusia para obtener el 74% de su gas y el 86% de su petróleo en 2024, y en un informe la entidad advirtió que un corte generalizado del suministro de gas natural ruso en la UE podría provocar pérdidas de producción en Hungría superiores al 4% de su producto interno bruto.

Funcionarios magiares habían declarado, antes de la reunión, que Orbán pretendía explorar una vía para un encuentro entre Estados Unidos y Rusia y solicitar exenciones a las sanciones energéticas estadounidenses.

En octubre, Trump impuso sanciones relacionadas con Ucrania a las petroleras rusas Lukoil y Rosneft, que incluían la amenaza de nuevas sanciones a entidades en países que compran petróleo a dichas compañías.

Durante el contacto que tuvieron con los medios, Trump elogió la política migratoria de Orbán y dijo que los líderes europeos deberían “respetar” al primer ministro húngaro por aplicar una “postura firme” contra la inmigración, al tiempo que insistió en que Europa debe detener y revertir la llegada masiva de migrantes.