“Este 25 de marzo celebramos el Día del Niño por Nacer, una fecha en la que hacemos un llamado a la defensa de la vida humana desde su concepción y reafirmamos que la vida siempre vence a la muerte. Esta fecha se conmemora en Argentina desde 1998 por iniciativa del entonces presidente Carlos Menem, quien tomó la decisión luego de visitar al papa Juan Pablo II en el Vaticano”, dice el mensaje publicado este martes en la cuenta de X de la Casa Rosada, retuiteado por el presidente, Javier Milei, y fue una de las aristas que tuvo la fecha, que fue celebrada por todo el arco ultraconservador argentino y que unió al mandatario con su vicepresidenta, Victoria Villarruel, de quien está públicamente distanciado desde hace largo tiempo.

Medios argentinos informaron que la ciudad de Buenos Aires y otras zonas cercanas a la capital argentina amanecieron empapeladas de afiches con una foto de un bebé dormido y un mensaje conmemorativo de esta fecha: “Los niños no se matan”.

En la misma línea, en la tarde de este martes, en el salón Azul del Senado, Villarruel fue la principal oradora en una actividad en la que también participaron referentes académicos ultraconservadores y ultracatólicos, algunos de los cuales ya se manifestaron en el Congreso explícitamente en contra de la norma de interrupción voluntaria del embarazo (IVE), sancionada en 2020 y promulgada un año después.

Si bien desde el oficialismo saben que no cuentan con los votos en el Congreso para derogar la normativa, que en su momento fue aprobada con un amplio apoyo de todos los sectores políticos en medio de una fuerte controversia social, nunca ocultaron su intención de poder hacerlo.

El diario Página 12 recordó que a fines del año pasado el presidente de la Cámara de Diputados, el libertario Martín Menem, declaró que “personalmente” estaba a favor de la iniciativa y remarcó que él era “pañuelo celeste de acá a la China”, en contraposición a los pañuelos verdes, que es el emblema de las defensoras de la ley.

En su intervención de este martes en el Congreso, Villarruel, quien un día antes, en el aniversario del golpe de Estado de 1976, se había limitado a criticar el accionar de los grupos guerrilleros, expresó: “Muchas madres en nuestro país no encuentran el apoyo; necesitamos políticas públicas globales que protejan a las madres; la solución no puede ser la resignación, sino que tiene que ser el acompañamiento”.

“Ofrecer el aborto a una mujer embarazada es abandonarnos a la mediocridad. Construyamos una Argentina que sea un ejemplo en la defensa de la vida”, agregó la vicepresidenta, de acuerdo a lo que consignó Clarín.

Horas antes de la conferencia en el Congreso, Villarruel se había expresado sobre el tema en su cuenta de X: “Hoy en Argentina se han abortado desde la promulgación de la ley de aborto una cantidad muy superior a todos los habitantes de Tierra del Fuego. Nunca una política estatal que engendra muerte puede significar un avance ni un derecho. Todas las vidas importan”, concluyó.

Milei no se expresó directamente al tema este martes, pero sí lo había hecho públicamente al menos dos veces durante el último año. En 2024, poco antes de la celebración del Día de la Mujer, el mandatario ultraderechista participó en un acto en el colegio Cardenal Copello, en el que él y su hermana Karina se formaron, donde dijo que el aborto es un “asesinato agravado por el vínculo”, y habló de “los asesinos de los pañuelos verdes”. Ese día Milei, además, agregó que podía demostrar sus afirmaciones “desde una perspectiva matemática, filosófica, desde el liberalismo y desde lo biológico”.

Más cerca en el tiempo, en su participación en el Foro Económico celebrado en la ciudad suiza de Davos en enero de este año, el presidente argentino, durante su polémico discurso, volvió a manifestarse en contra del aborto, cuya defensa enmarcó dentro del “virus mental de la ideología woke”.