El Kremlin y la Casa Blanca confirmaron que este martes el presidente ruso, Vladimir Putin, tendrá una conversación telefónica con su par estadounidense, Donald Trump, en la que ambos líderes tratarán posibles alternativas para detener la guerra en Ucrania.
El contacto directo entre los mandatarios fue precedido por diálogos entre funcionarios de ambos gobiernos, de acuerdo a lo que expresó el propio Trump.
“Hablaré con el presidente Putin el martes. Se ha trabajado mucho durante el fin de semana”, declaró el magnate republicano a la prensa en el Air Force One, durante un vuelo desde Florida a Washington.
Trump además especificó que en la conversación con el líder ruso se centrará en cuestiones territoriales y en el manejo de centrales energéticas.
“Creo que hablaremos del territorio. Es mucho territorio. Es muy diferente de lo que era antes de la guerra, como saben. Hablaremos de centrales eléctricas. Es una cuestión importante, pero creo que ya hemos discutido mucho entre ambas partes, Ucrania y Rusia. Ya estamos hablando de eso: de dividir ciertos activos”, declaró el mandatario estadounidense. “Queremos ver si podemos poner fin a esa guerra. Tal vez podamos, tal vez no, pero creo que tenemos una muy buena oportunidad”, agregó.
Como es habitual, desde el Kremlin se expresó el portavoz presidencial, Dmitri Peskov, quien dijo que la “conversación efectivamente se está preparando para el martes”.
No obstante, las pretensiones del Kremlin, al menos las que ha manifestado en varias ocasiones Putin, son inaceptables para Ucrania y para sus aliados europeos.
Mientras está a punto de expulsar por completo a las tropas ucranianas que todavía quedan en la provincia rusa de Kursk, Moscú pretende, como condición para finalizar la guerra, quedarse con todos los territorios que ocupó hasta ahora, incluida la totalidad de las provincias ucranianas de Donestk, Lugansk, Zaporiyia y Jersón.
Además, el gobierno de Putin exige que Ucrania deje de lado sus pretensiones de ingresar a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Trump ya descartó el ingreso de Kiev a la alianza transatlántica. El secretario de Defensa estadounidense, Pete Hegseth, declaró en febrero en una cumbre de la alianza atlántica en Bruselas que es “poco realista” que Ucrania recupere sus territorios para volver a las fronteras anteriores a 2014, cuando Rusia anexionó la península de Crimea.
Este lunes, también en la capital belga, donde se encuentra la sede de la Unión Europea (UE), se celebró un encuentro en el que se abordó la situación en Ucrania.
En ese ámbito, la jefa de política exterior del bloque, la ex primera ministra de Estonia Kaja Kallas, declaró que las condiciones exigidas por Rusia para acordar una tregua o un alto el fuego permanente demuestran que Moscú no desea realmente la paz.
“Esas condiciones que han presentado demuestran que, de hecho, no desean la paz, porque están presentando como condiciones todos los objetivos finales que pretenden alcanzar con la guerra”, declaró Kallas a la prensa en Bruselas.
Los cruces entre los europeos y Rusia no se terminaron ahí este lunes. En la conferencia de prensa que dio este lunes en Moscú, el portavoz del Kremlin dijo que el despliegue de tropas de la OTAN en Ucrania que algunos países aliados de Kiev están manejando sólo exacerban las causas profundas del conflicto.
“Es una tendencia absolutamente peligrosa”, dijo Peskov, quien, repitiendo la línea del gobierno que representa, expresó que una solución viable del conflicto únicamente es posible si se tienen en cuenta y se abordan sus causas profundas.
El domingo, el diario inglés The Times informó que los aliados del gobierno de Volodímir Zelenski pretenden enviar hasta 30.000 soldados de diversas nacionalidades a Ucrania una vez que finalice la guerra. Fuentes de alto rango del gobierno de Reino Unido dijeron que el primer ministro británico, Keir Starmer, había conseguido el apoyo de un número significativamente mayor de naciones dispuestas a contribuir con tropas terrestres.
Starmer dijo durante una conferencia de prensa, el sábado, que los jerarcas militares de los países occidentales se reunirán en Londres el jueves para desarrollar planes prácticos para que los soldados occidentales apoyen la seguridad futura de Ucrania.
Al mismo tiempo, el presidente francés, Emmanuel Macron, declaró que los países europeos podrían enviar su contingente militar a Ucrania y ubicarlo, en particular, en las ciudades de Kiev, Lviv y Odesa.