El 5 de mayo asumieron las nuevas autoridades del Consejo de Formación en Educación (CFE). Luego de cinco años y 13 días dejamos nuestros cargos Ana María Lopater, María Dibarboure y quien suscribe.

La formación en educación es más nombrada que conocida. Parece sano, entonces, difundir en forma muy resumida la labor que cumplimos en estos cinco años quienes hemos cesado.

Cabe señalar que esta tarea fue desarrollada colectivamente en un consejo que además de los nombrados estuvo integrado por representación docente: Edison Torres hasta 2018 y Rosana Cortazzo desde entonces hasta la fecha, y con representación estudiantil que ha rotado sus consejeros según lo estableció la lista ganadora de las elecciones de consejero estudiantil, pero con presencia permanente.

El proceso se desarrolló con base en una amplia y continua participación docente, estudiantil, de egresados y funcionarios, según las temáticas. Se discutió, se negoció, se acordó y se tomaron decisiones.

El trabajo se desarrolló a partir del documento aprobado en mayo de 2015 “Orientaciones y objetivos. Consejo de Formación en Educación 2015-2020”.3 Ese documento estableció las líneas generales del consejo durante todo el período y luego se transformó en un Plan Estratégico que se plasmó en el presupuesto para el quinquenio.

El principal propósito del CFE en este período fue avanzar en la transición hacia una formación universitaria, en el marco legal existente, con independencia de la aprobación de la Universidad Nacional de Educación (Uned) a la que aspiramos.

Entendimos que el CFE tenía condiciones para avanzar en una cultura universitaria sin esperar la modificación de su estatus legal; en todo caso, la aprobación de la Uned nos iba a encontrar con camino andado en esa dirección.

Entendemos –y esto tiene un importante consenso nacional e internacional– que la formación de los educadores debe realizarse en una institución donde se crea conocimiento y que cuenta con docentes investigadores. Una formación inicial que se continúa con la formación en servicio, permanente y de posgrados.

Así fue que nos propusimos seis objetivos relacionados entre sí: 1) Mejorar en número y calidad los profesionales de la educación; 2) Modificar el plan de estudios a partir de la evaluación anterior, incorporando una visión universitaria; 3) Establecer una estructura académica y una nueva estructura docente con base en cargos y grados académicos; 4) Establecer una política de formación continua, permanente y de posgrados; 5) Desarrollar la investigación educativa; y 6) Mejorar la gestión basada en información, participación, transparencia y rendición de cuentas.

Muy brevemente presentaremos sólo algunos de los avances obtenidos en estos años.4

  1. Se crearon cinco carreras y especialidades nuevas. En especial es de destacar la creación de la carrera de Maestro/a de Primera Infancia en 2017, que obedeció a una política nacional en favor de niños y niñas desde el nacimiento hasta los seis años y la expansión educativa que cubrió en estos años la universalización de cuatro y cinco años, la universalización de la oferta educativa para niños y niñas de tres años y la expansión para edades más tempranas en diversas modalidades de atención y educación. En 2020 esta carrera se imparte en 12 institutos de todo el país con una matrícula de 2.828 estudiantes y 106 egresados.
  2. Se extendió y fortaleció la modalidad de profesorado semipresencial por la cual se cursan estudios presenciales en asignaturas comunes con otras carreras en los institutos de formación docente del interior y las asignaturas específicas para cada especialidad en modalidad virtual. Esta modalidad creció 30% su matrícula y 27% sus egresos en estos cinco años. También se incorporó la modalidad semipresencial en la formación de maestros técnicos y en la experiencia de formación magisterial para Bella Unión.
  3. Se extendió y se incrementó el número de becas estudiantiles. Se ajustó el Reglamento de Becas que incluye la renovación con base en resultados académicos y un compromiso del becario a trabajar en la educación pública durante un lapso similar al que recibe la beca. El CFE cuadriplicó con fondos propios los recursos destinados a las becas y dio seguimiento a su impacto, constatándose que 71% de los becarios avanza o egresa a tiempo de sus carreras. En 2019 se otorgaron 1.406 becas de ayuda económica1 y 832 becas de residencia, transporte o alimentación a estudiantes de los Centros Regionales de Profesores.
  4. Se incrementaron tanto la matrícula como los egresos. La matrícula se incrementó 22% y los egresos de carreras de grado, 17%.
  5. Se elaboraron nuevos planes de estudio con amplia participación de docentes, estudiantes y egresados. Esta reformulación se basó en el documento “Fundamentos y orientaciones”.2 La propuesta establece los perfiles de egreso comunes a todas las carreras e incorpora la semestralización, la creditización y la flexibilidad curricular de forma que los futuros profesionales de la educación puedan transitar entre las formaciones y obtengan una formación sólida e integral en los tres núcleos fundamentales: equivalente, específico y didáctico-práctico. El CFE aprobó los planes de Maestro/a de Primera Infancia y de Maestro Técnico y Profesor Técnico que están vigentes, y los planes Maestro de Educación Primaria, Profesorados y Educador Social que fueron devueltos por el Codicen para ser revisados previo a su homologación.
  6. Se creó una nueva estructura académica, instalándose la Comisión de Enseñanza y Desarrollo Curricular, las Comisiones Nacionales y Locales de Carrera y la Comisión de Postgrados y Formación Permanente. Todas con participación de docentes, estudiantes y egresados. Además, se crearon cinco Institutos Académicos que abarcan Departamentos y Unidades Académicas: de Matemática y Ciencias, de Humanidades y Artes, de Ciencias de la Educación, de Disciplinas Técnicas y Tecnológicas, y de Educación Social.
  7. Se elaboró en acuerdo con ATD y el sindicato un nuevo Capítulo del Estatuto Docente para la Formación en Educación. Este capítulo fue aprobado por el Codicen y ya se encuentra vigente. Establece grados académicos de libre acceso por concurso, con independencia de la antigüedad, con efectividades renovables por medio de procesos de evaluación integral.
  8. Se realizaron 150 concursos de oposición y méritos, entre 2018 y 2019, para acceder a cargos u horas docentes en efectividad por secciones o subsecciones (agrupamientos temáticos y de asignaturas), con tribunales con participación de especialistas externos al CFE, donde se presentaron 1.778 proyectos y obtuvieron efectividad 849 docentes. Esto permite estabilidad, carrera profesional y selección con base en la formación y capacidad docente.
  9. Se ofrecieron 263 cursos de formación permanente para docentes de todos los niveles educativos para inspecciones, direcciones, docentes de práctica, educación inicial, dificultades de aprendizaje, entre otros. En total participaron 11.500 docentes.
  10. Se realizaron 19 diplomas y especializaciones con diferentes servicios de la Universidad de la República (Udelar) y hasta 2020 se ofrecieron siete maestrías con UdelaR, FLACSO de Uruguay y con UNIPE y Universidad de la Plata de Argentina. En total se realizaron 11 cohortes donde participaron más de 500 docentes.
  11. Se creó el Programa de Apoyo al Desarrollo de la Investigación Educativa (Pradine), que elaboró un Documento Estratégico que establece componentes para la iniciación a la investigación, el fortalecimiento de equipos de investigación y la difusión de los resultados; el Programa desarrolló su primer plan de acción en 2019 y se aprobó el correspondiente a 2020.
  12. Se creó el Fondo Sectorial en Educación CFE Investiga, en acuerdo con ANII, que otorgó recursos para 28 equipos de investigación en cuatro convocatorias. Además, a partir de Pradine se otorgaron recursos para apoyar a 13 equipos de iniciación a la investigación.
  13. Se creó el Repositorio Institucional de Acceso Abierto (RIDAA), donde se accede a publicaciones académicas del CFE en forma libre; al 30 de abril había 640 publicaciones ingresadas.
  • Se transformó la gestión, incorporando la informatización de todos los procesos de gestión estudiantil, desde la inscripción al egreso, y de gestión humana, desde el concurso a la toma de posesión y liquidación de sueldos.
  1. Se establecieron mecanismos para la planificación y racionalización de la oferta educativa, los gastos e inversiones, que permitió mejorar la calidad de la ejecución presupuestal y desarrollar nuevas políticas como las de becas, posgrados e investigación con los mismos recursos.

En momentos en que se presentan propuestas vinculadas a la formación docente incluidas en el proyecto de LUC, es bueno que se discutan a partir de lo hecho y no de un relato de una formación docente que no existe.

He presentado una selección de lo que entiendo más relevante en cinco años de trabajo en el CFE, dirigido a darle el contenido universitario que se necesita y que merecen nuestros profesionales de la educación.

En momentos en que se presentan propuestas vinculadas a la formación docente incluidas en el proyecto de ley de urgente consideración, es bueno que se discutan a partir de lo hecho y no de un relato de una formación docente que no existe.

Mucho queda por hacer, y un tránsito hacia el nivel universitario es una tarea que se mide en lustros o décadas. Pero hay un camino iniciado que más que enmendar es necesario profundizar.

Luis Garibaldi es maestro y fue consejero del Consejo de Formación en Educación.


  1. Ocho cuotas de dos Bases de Prestaciones y Contribuciones a través del Fondo de Solidaridad. 

  2. Fundamentos y orientaciones de la Propuesta 2017 en: http://www.cfe.edu.uy/images/stories/pdfs/documentosaprobadoscfe/documentoorientaciones_objetivos.pdf 

  3. Orientaciones y objetivos. Consejo de Formación en Educación en: http://www.cfe.edu.uy/images/stories/pdfs/documentosaprobadoscfe/documentoorientaciones_objetivos.pdf 

  4. Una visión más amplia de lo realizado se puede obtener en http://www.cfe.edu.uy/images/stories/pdfs/documentosaprobadoscfe/2019/memoria2015-2019_web.pdf