Tras su alejamiento de Vamos Uruguay (VU), Guillermo Stirling, el ex ministro del Interior y ex candidato a presidente del Partido Colorado (PC), volvió al ruedo político el lunes en San José durante un acto de la lista colorada Triple 15, en el que se reeditó el apoyó a la candidatura comunal del Herrerismo, que en 2005 estuvo representado por Juan Chiuruchi y en 2010 lo estará por José Luis Falero. El Comité Ejecutivo Nacional (CEN) colorado resolvió ayer por unanimidad pasar a estudio de la asesora de Ética y Conducta Política al titular de la Triple 15, Francisco Zunino, por esta decisión. El diputado por San José, Gustavo Cersósimo (VU), criticó la decisión de su primer suplente al confesar: “Estamos muy apesadumbrados, no esperábamos esta actitud contra el PC”. En octubre la Triple 15 representó el 38% de los votos colorados maragatos. “Con la decisión de juzgar la conducta [de Zunino] se sigue demostrando el preocupante autismo político del nuevo PC”, contragolpeó Stirling en diálogo con la diaria.

Por su parte, el prosecretario del PC, Max Sapolinsky, designado vocero del CEN, explicó que el punto de la decisión “no pasa por una discusión conceptual” sino por el incumplimiento de Zunino de la resolución de la Convención Nacional del partido de que, en todo el país, los colorados debían apoyar a los candidatos propios.

Para Stirling “falta análisis global de la situación” y la “realidad política es que hay que tener visión de futuro, programática y política, entre ambos partidos; si no, está difícil ganarle al FA”, dijo y aclaró que esta afirmación corre para San José y el resto del país. “Es un tema de pragmatismo político. En Chile se dieron cuenta de que si no se unían tenían Concertación para rato”, resumió. “¿Acaso el Partido Socialista o la Democracia Cristiana perdieron su identidad política en 20 años de Concertación?”, ejemplificó para explicar por qué el PC no perderá la suya.

Algo similar ocurre en el Frente Amplio de Florida, ya que el Tribunal de Conducta Política (TCP) analizará el respaldo que la presidenta de la Junta Departamental de Florida, Jacqueline Dárdano (CAP-L), concretó el lunes a la candidatura blanca de Carlos Enciso (Correntada Wilsonista). “Para nosotros es una buena noticia”, expresó el diputado frenteamplista por el departamento Álvaro Vega (MPP). “Se fue del MPP porque no estaba en las listas a Diputados y le advertimos a la CAP-L que no la integrara, y ahora, mirá... Es como una bomba que en cualquier momento puede explotarte adentro”, protestó.

Dárdano, por su parte, indicó a la diaria que “de ninguna manera renunciará a la fuerza política porque ella es “frenteamplista fundacional”. “Las departamentales son muy diferentes a las nacionales y el frenteamplismo de Florida se convirtió en un organigrama de cargos. Yo no traiciono ni a mi conciencia ni al pueblo”, señaló. La edila recordó que José Mujica llegó a la presidencia “con el voto de otros partidos políticos, que jamás dejamos de aceptar”. “Juan Raúl Ferreira no apoyó a su candidato y por eso nadie pensó que se iba del PN”, deslizó.

También trajo a colación que no es la primera vez que la envían al TCP: en agosto la cuestionaron porque la mesa política floridense había resuelto apoyar al edil Carlos Rodríguez (MPP) para la presidencia de la junta, pero Dárdano se votó a ella misma y salió electa con el respaldo de blancos y colorados. “Vega votó en contra de la ley que crea el Centro para la Inclusión Tecnológica y Social y nadie le tiró de las orejas. La conducta de [Juan Carlos] Bengoa no la han analizado. Ojalá que asuman que me vienen discriminando”, dijo. No tiene claro su futuro pero anticipó que “mientras siga con fuerza y salud” seguirá en política sin ser “soldado de nadie”.

En el Partido Nacional también se produjeron pases. En Rivera una agrupación integrada por ex dirigentes y militantes blancos en el Herrerismo tendrá su lista propia en mayo para apoyar al candidato frenteamplista Antonio Cabrera. La lista estará encabezada por la ex edila Susy Vega, quien en el período pasado renunció al PN. Ése es el motivo por el cual no corresponde analizar su conducta política, explicó Gerardo Amarilla, diputado blanco por Rivera.